Sergio González no solo ha hablado esta mañana del encuentro del domingo ante Osasuna. También se ha referido a unas declaraciones del presidente de La Liga, Javier Tebas, en las que acusaba al actual técnico del Real Valladolid de haber avisado del amaño del Zaragoza-Levante, que está en pleno juicio. Tebas respondió, a preguntas del fiscal Anticorrupción Pablo Ponce, que el expresidente del Deportivo de La Coruña Augusto César Lendoiro -el club gallego acabó descendiendo como consecuencia de la victoria del Zaragoza ante el Levante- le llamó y le dijo que el actual entrenador del Real Valladolid, Sergio González, que pertenecía al Levante en la temporada del partido investigado, le había contado que dicho encuentro "estaba amañado", recogía ayer Europa Press. Esta llamada se produjo de forma previa al partido. Tebas comentó que tras hablar con Lendoiro, llamó inmediatamente al presidente del equipo valenciano, Quico Catalán, y que este le aseguró que sus jugadores le habían dicho que "no había nada".
El actual entrenador del Real Valladolid, al que Tebas se refirió como Sergio... creo que González..., ha sido muy duro con el presidente de la Liga. "Me gustaría aclarar mi versión sobre lo de ayer. Lo primero que me gustaría destacar y reflexionar es sobre el tema del señor Tebas. Siendo el presidente de la Liga de Fútbol debería tener una deferencia a la hora de hablar de según qué personas. Es una persona que está preocupada porque seamos la mejor Liga del mundo, expandir la marca LFP fuera de lo que es España… y lo primero que tendría que saber es el nombre de los integrantes de lo que es la Liga de fútbol. Creo que referirse al entrenador, en este caso por suerte que soy yo, del Real Valladolid como 'Sergio… creo que González, creo que tal, que si está entrenando o si creo que no ha dejado de entrenar'... creo que dice muy poco de una persona que ocupa el cargo que ocupa. El presidente de la Liga de Fútbol Profesional tiene que tener un respeto máximo por todos los integrantes de la misma, sobre todo, con los futbolistas y con los entrenadores. Al menos tenemos la suerte de estar aquí, pintamos lo mismo que él, somos 20 entrenadores los que tenemos la suerte de estar en Primera y es muy sencillo dirigirse a mí con educación y como Sergio González, entrenador del Real Valladolid, porque tengo claro que lo sabe. La primera alusión es a él y en la forma de desprecio o algo despectiva de dirigirse a mí".
En una larga alocución, el técnico blanquivioleta ha añadido que "me gustaría trasmitir que es muy fácil, porque él es abogado, y tiene la capacidad de saber que hay un vacío legal cada vez que dices una declaración y mencionas ‘según dicen, según Lendoiro me ha dicho o tal...’ porque en ese vacío legal yo no voy a poder denunciarle. Lo que me hubiera gustado es que él predica que la LFP es una Liga íntegra, que busca una Liga limpia, y me hubiera gustado que él también fuera tan íntegro como para que si él tiene un rumor que es mentira, hiciese lo imposible o lo posible para saber si ese rumor es certero o no; y que después fuese él el que lo dijese de su propia boca, y no fuera el que dijera que ‘a través de… según me han dicho, según Lendoiro’. Como es abogado se acoge a ese vacío legal, y yo me quedo con los brazos cruzados y no puedo denunciarle porque al final siempre hay un ‘según me dice’. Y, a través de eso, tira una bomba al aire y que salga por donde salga".
Por todo ello, y zanjando la polémica, ha dejado claro que "si él quiere integridad, respeto, quiere que todo sea fino y clarito, que él haga lo mismo y lo ponga en su boca y que lo manifieste él con sus pensamientos o argumentos o como lo hubiera sabido si piensa que ha habido algo raro o tiene una mínima información".
El viernes que viene, Sergio testificará en el juicio sobre ese encuentro. Lo hará "con la conciencia tranquila, sin miedo a nada porque no hay nada a lo que temer".