El mediocentro, cedido por el Real Valladolid al Real Oviedo, Luismi Sánchez fue presentado este lunes como futbolista del conjunto azul tras dos partidos de titular con el equipo carbayón, al que agradeció la insistencia en hacerse con sus servicios tras más de un año sin jugar y a sabiendas de que no iba a tener minutos en Valladolid, club que aún le tiene en propiedad.

"El Oviedo insistió mucho, y que venga un equipo como este a por ti a decirte que te quiere y te necesita, es de agradecer. Sabía que en Valladolid no iba a tener minutos y Oviedo fue siempre mi primera opción, la espera se hizo larga pero sabía que quería venir desde el primer momento y que antes o después de cerraría la cesión", explicó el jugador azul, en declaraciones que recoge Efe. Luismi se estrenó ante Almería (2-0) y Huesca (1-1) con dos buenas actuaciones en lo individual pese a los resultados, y es "el reloj" que buscaba el director deportivo, Francesc Arnau, para la medular de un Real Oviedo en el que ya dejado ver, en palabras del propio ex portero, el jugador fiable que es y su gran estado de forma pese a venir de una larga inactividad.

"Llevaba un año prácticamente en blanco en Valladolid, el jugador lo que quiere son minutos y tengo mucha ilusión por aprovechar esta oportunidad única. Todo cuesta un poco cuando llegas a un equipo nuevo, empezando por los conceptos del míster, pero me han ayudado mucho", apuntó el gaditano.

El mediocentro comentó que el técnico, Javi Rozada, le pidió "equilibrio y fuerza" para el mediocampo y explicó que no piensa en lo que será de él a partir de junio, sino en los tres puntos vitales que se juega el equipo ante el Girona el domingo. "Soy un jugador polivalente, puedo adaptarme a cualquier situación del campo, incluido el trivote. Con Tejera coincidí en el Nástic y estoy muy cómodo, y Jimmy tiene un gran despliegue físico. Hay compromiso, actitud y ganas, el tema es que entre el balón", concluyó el jugador, sobre el que hay opción de compra pero ligado a un ascenso a Primera.