Una banda especializada en los asaltos a viviendas con el método de la ‘llave mágica’ ha obligado a la Comisaría Provincial a activar un dispositivo especial de vigilancia en toda la ciudad para acabar con una oleada de robos que tiene a la Policía Nacional en jaque desde hace aproximadamente un mes. Estos ladrones intensificaron su actividad en el pasado puente de la Constitución, con una decena de asaltos, lo que ha hecho saltar todas las alarmas en la ciudad. «Nos están dando palos pero bien, sobre todo en pisos», tal como apunta una fuente policial a El Día de Valladolid. «Ya ha pasado en otras épocas, pero ésta está siendo de las más gordas», comenta otra. Hace ahora tres años, en el mes de noviembre de 2012, por ejemplo, dos búlgaros robaron, también con el método de la ‘llave mágica’, en una veintena de viviendas de la ciudad. Terminaron cayendo en enero, tras semanas de un intenso trabajo de decenas de policías en lo que se llamó como Operación Llave, pero quedaron en libertad con cargos días después. «El juez entendía que al no haber actuado con violencia ni intimidación no era necesario su encarcelamiento preventivo...», recuerdan.
Desde la Comisaría Provincial de Valladolid reconocen que se ha vivido un «repunte» en las últimas semanas y admiten igualmente que es «un tema que preocupa». «Hay un grupo específico que se dedica a la investigación de estos delitos. Siempre, durante todo el año, porque es un asunto muy sensible para la seguridad, pero, además, se refuerza en épocas de vacaciones como las navideñas, que ahora se aproximan», detallan. «En estos momentos hay órdenes de prestar mayor atención, pero no se ha reforzado como tal al grupo», aseguran desde Comisaría.
La versión oficial busca hacer una (lógica) llamada a la calma, se rehuye el término «oleada», pero lo cierto es que todas las fuentes policiales consultadas por este periódico aseguran que, en efecto, sí que hay un dispositivo especial en marcha denominado Operación Llave y que, mal que les pese, se está ante «una oleada de robos». «El asunto nos tiene en alerta. Nos están dando pero bien», confiesan algunas de esas fuentes.
La banda de asaltantes asomó la cabeza en los primeros días del mes de noviembre. Fue ‘tocando’ en diversos puntos de la ciudad y acentuó su actividad durante el puente de la Constitución. «Se han recibido entre dos y tres avisos al día durante el pasado puente», tal como detallan mismas fuentes. El último que ha podido confirmar este periódico fue el miércoles por la tarde y hablaba de un asalto a un chalé unifamiliar del barrio de Parquesol. «Salieron dos horas los moradores y aprovecharon para entrar», explican.
Por toda la ciudad. Desde Comisaría confirman, en este mismo sentido, que los ladrones de pisos «están tocando distintos puntos de la ciudad», en lugar de centrar su actividad «en una zona en concreto». «Sí, sí, por casi todos los barrios. Su gran movilidad lo hace todo más complicado, como es lógico», añade otra fuente. Lo que no se tiene todavía claro es si puede tratarse de una banda que se haya instalado durante este mes en Valladolid o si sería un grupo itinerante, que aparece durante unas horas en la ciudad, pega los palos que considera oportunos y regresa a su ciudad.
Al parecer, en todos los casos, esta banda habría utilizado una ‘llave mágica’, una herramienta que usan los cerrajeros y que en el último lustro se ha colado en el mercado negro hasta el punto de que los ladrones encuentran en internet tutoriales para aprender a ‘trabajar’ con ella e, incluso, se ofrecen por poco más de 300 euros. Es una herramienta que abre las puertas sin forzar las cerraduras y sin dejar rastro.
La Policía tiene claro que estos delincuentes se cercioran bien de que los pisos estén vacíos, porque en todos los casos los moradores estaban fuera del domicilio en el momento del robo. Por ello, una de las recomendaciones básicas es que, en el caso de los bloques de viviendas, que nadie franquee la puerta del portal a personas desconocidas.