El consejero de Fomento y Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, confirmó hoy su compromiso con la integración ferroviaria de Valladolid, en la que colabora de forma económica con más de 80 millones de euros, en el seno de la Sociedad Alta Velocidad, para “todo lo que la ciudad crea que es necesario en el ámbito del ferrocarril”.

Al respecto, recordó que son el Ayuntamiento, Adif, Renfe y el Ministerio de Transportes las administraciones qué deben decidir cómo será la integración en la ciudad y adelantó que la competencia de su departamento se dirige hacia la construcción, en el ámbito de este proyecto, de una estación de autobuses “digna” para la ciudad.

Suárez-Quiñones se refirió a la petición del Grupo Municipal Popular en el Consistorio, quien pidió de nuevo que se vuelva al proyecto de soterramiento del ferrocarril. “Colaboraremos siempre en la solución que determine quienes tienen la competencia. Nuestra labor aquí es la estación de autobuses de la ciudad, una instalación actual absolutamente indigna para Valladolid. Ahí sí que intervendremos y será aquello que queramos, en colaboración con las otras administraciones”, concluyó.

Por su parte, el alcalde de Valladolid, Óscar Puente, informó de que la Junta de Gobierno del Consistorio dio luz verde hoy a un trámite que forma parte de los acuerdos adoptados en el seno de la Sociedad Valladolid Alta Velocidad sobre la construcción de los pasos que serán supervisados por Adif, concretamente los cuatro de la zona noreste, junto a Labradores y Panaderos. El resto se realizarán y construirán bajo la vigilancia del Ayuntamiento.

Por último, aseguró que "no perdería ni medio minuto" en valorar el hecho de que el PP municipal pida ahora el soterramiento. "Si quiere bailar lo de ‘un pasito pa´alante y otro para atrás María’ de Ricky Martin, pues fenomenal. Nosotros miramos hacia el futuro. Que no se preocupen que la integración ferroviaria saldrá adelante", sentenció.