El periodista Ángel María de Pablos, Premio de Periodismo Francisco de Cossío a la Trayectoria Profesional, insistió hoy en la importancia de la verdad al trasladarle a la gente “lo que pasa y lo que no pasa”. “Hay que contar la verdad, porque nos hará libres”, dijo para recordar a uno de sus maestros, el padre Gago, que confió sea beatificado, para tener entre los compañeros al primer santo.
En su intervención, tras recibir el galardón, De Pablos insistió en no adulterar la verdad, ni en ocultarla para no molestar de arriba o por pertenecer a otro barrio en este “hermoso” trabajo. De esta forma, recordó a David Beriain y Roberto Fraile, los periodistas asesinados en Burkina Faso, que destacó se jugaron la vida y encontraron la muerte en su empeño por trasladar al mundo lo que ocurre en las tribus de ese país.
El veterano Ángel María de Pablos, que prefirió hablar sin llevar nada escrito, reconoció sentir cierto rubor por recibir el Premio que lleva el nombre del que fue director de El Norte de Castilla y amigo de su padre, así como unas semanas después de que dos compañeros entrañables fueron asesinados en Burkina Faso, Roberto Fraile y David Beriain.
Recordó que su dedicación al periodismo es “culpa” de su padre, que fue redactor jefe y director de El Norte de Castilla, periódico en el que ahora está trabajando su hijo, por lo que ya son tres las generaciones con el apellido De Pablos en este rotativo. Explicó que su primera crónica, con 14 años, fue sobre una prueba ciclista por encargo de su progenitor que le preguntó si se atrevía a hacerlo, algo que se repitió con su incorporación a Televisión Española. Destacó que aquella etapa, que compartió con Miguel Delibes, le dio el “aplomo” y le enseñó el oficio que ejerció durante décadas después.
En el acto se recordó a los periodistas fallecidos durante el último año, entre ellos, a Luis Barcenilla, uno de los impulsores de los galardones. Así, el presidente de la Junta,Alfonso Fernández Mañueco, le entregó una placa a su viuda Begoña Grijalbo que agradeció el reconocimiento por estar ligado a los Premios Cossío. Además, destacó que siempre fue “fiel” y aportó su profesionalidad a la Junta, por lo que lamentó el “dolor injustificado” de los últimos tiempos, y añadió que ella inicia ahora una etapa de reconciliación ya que “soplan nuevos vientos” en el Colegio de la Asunción.
Prensa, fotografía y digital
El periodista Carlos Fidalgo, de Diario de León, recogió el premio por el trabajo titulado ‘Las cuencas vacías’, una serie de reportajes publicada por este periódico entre el 23 de octubre de 2018 y el 31 de diciembre de 2019, que ahonda en el fenómeno de la despoblación en los pueblos de montaña del Bierzo Alto a partir del declive del carbón.
Nacho Gallego recogió el premio por la fotografía titulada ‘Despedida de Herrera’, distribuida el 12 de julio de 2019 por la Agencia EFE y publicada entre otros medios por el diario ABC. Además, María Coco obtuvo el destinado a medios digitales por el reportaje multimedia ‘Al otro lado del fuego’, ofrecido en el periódico nativo digital Segoviaudaz.es el 5 de agosto de 2019.
<b>Radio y televisión</b>
En la modalidad de radio, José Antonio Ramos, de Onda Cero Salamanca, recogió el galardón al programa 'La mina de uranio de Retortillo', emitido el 6 de junio de 2019 en el espacio 'La Brújula', que dirige y presenta Juan Ramón Lucas.
Manuel Centeno recibió el de televisión por trabajo ‘Relato de una tragedia’, emitido el 26 de febrero de 2019 en el programa ‘Sobre ruedas’ de la 8 Valladolid, de RTVCyL. Este trabajo periodístico aborda el atropello sufrido por dos ciclistas en el que uno de ellos perdió la vida.
El acto, aplazado por el impacto de la pandemia, se celebró en la sala Teatro Experimental del Centro Cultural Miguel Delibes de Valladolid, convertido en centro de vacunación del COVID. Contó con la presencia de Fernández Mañueco, pero también del vicepresidente, portavoz y consejero de la Transparencia, Ordenación del Territorio y Acción Exterior, Francisco Igea, y el titular de la Presidencia, Ángel Ibáñez, entre otros.