Astronautas en Pisuerga

M.B
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El Club Deportivo Gimnasia Acrobática Valladolid cosechó en el último trimestre del año tres medallas, dos absolutas y una por edades, en sendos Mundiales de trampolín en Bakú

Erica Sanz y Carlos del Ser, en un entrenamiento en Pisuerga. - Foto: J. Tajes

La gimnasia trampolín tiene casi cien años de historia y en Estados Unidos está muy vinculada a la preparación de los astronautas de la Nasa. A Valladolid llegó un poco más tarde. Y cuando lo hizo, fue para quedarse. Desde hace una década, está más que asentada en tierras castellanas, derribando puertas y muros desde su búnker de Pisuerga. Allí trabaja y entrena el Club Deportivo Gimnasia Acrobática Valladolid de la mano de la familia Ginés-Montero (José Ginés fue olímpico en acrobática en Munich'72; y su mujer, Loreto Montero, también fue gimnasta). Hoy son sus hijas, Teresa y Loreto, las que están al frente de la entidad. Ambas estuvieron cerca de ser olímpicas en Barcelona ySeúl, y ahora ponen alma y espíritu sobre sus 55 gimnastas desde los 4 a los 20 años (más otros 70 participantes en el Centro de Promoción).

Esta disciplina deportiva es una de las que están bajo el paraguas de la gimnasia y consiste en enlazar ejercicios a máxima altura, ejecución y en ocasiones máxima dificultad. Lo llaman el 'arte de volar' y tiene como modalidades el dobleminitramp, el tumbling, el sincronismo y el trampolín, olímpico desde Sydney 2000.

El Club Gimnasia Acrobática Valladolid, una referencia ya a nivel nacional, nació como centro en 2005 y se creó como club en 2007. Aunque la acrobática sigue estando en sus genes (Teresa y Loreto fueron internacionales), desde 2013 la apuesta por el trampolín es su principal motor.

Andrés Martínez, David Franco, Carlos Manjón, Hugo Martín... fueron los primeros nombres que se asomaron a grandes citas en 2016. Luego fueron llegando otros muchos: Erica y Diana Sanz, Nicolás y Alejandro Toribio, Nuño Villafañe, Lucas de Benito, Daniel León, Loreto Tuñón, Marcos Crespo,Miguel Córdoba, Sara Tuñón, Carlos del Ser...

Hasta el último Mundial, disputado en Bakú. Allí, dos de sus representantes, Carlos Franco y Carlos del Ser, junto a otro vallisoletano criado en su seno, Andrés Martínez, y el gallego Santiago Brea lograron un bronce histórico para España (16 años después en un absoluto) en Dobleminitramp. Franco, además, fue cuarto en individual. A ese éxito, se sumó la plata de Erica Sanz en la categoría 17/21 también en Dobleminitramp.

Ha sido el culmen para un club que entrena todos los días en Pisuerga, en una instalación con cuatro trampolines, dos DMT, un foso y un tumbling (hinchable), todos en un pequeño espacio. «Llevamos tiempo buscando un sitio más adecuado (con mínimo 10 metros de altura), pero supone mucho dinero para un deporte como el nuestro, minoritario», reconoce Teresa Ginés, su directora técnica, recordando que en el último Nacional sumaron 25 medallas y para el Mundial tenían a diez clasificados (aunque por las restricciones de la covid se quedaron en cinco).

El club, que nació de un centro de promoción, ha ido creciendo de la mano de los Ginés-Montero, apellidos muy vinculados a la gimnasia. José, además de olímpico, fue el primer seleccionador español de trampolín. Y su hermano, Alonso, el segundo. Aunque de origen madrileño, se vino a Valladolid a dirigir el Centro de Tecnificación de Artística en 1986. Aquí se quedó y aquí sus hijas siguen su pasión por la gimnasia, por la artística y la de trampolín (en la que tanto Teresa como Loreto acudieron a citas como Mundiales y Europeos por edades en los años 90).

Erica, Carlos y David (en la concentración permanente de la selección Nacional de trampolín en Barcelona desde 2018) han sido los últimos en llevar el nombre de Valladolid a un podio mundial. Y en el club confían en que haya muchos más. De momento, preparan 2022, donde arrancarán en marzo en la Dutch Trampoline Open en Alkmaar (Países Bajos), luego llegará en mayo el Campeonato de España y en junio el de Europa en Italia. Allí esperan estar los tres en el absoluto; y alguno más en el de edades. París 2024 no queda tan lejos...