Aena espera que el sistema Instrument Landing System (ILS), que el aeropuerto de Valladolid instaló en el año 2007 para reducir las desviaciones de vuelos por niebla, pueda volver a estar operativo a partir del próximo lunes. En la actualidad el ILS no funciona, ya que se están llevando a cabo labores de calibración después de un fallo registrado en los últimos días, que se suma a una reparación que ya hubo que acometer el día 2.

Por este motivo, el pasado fin de semana se tuvieron que desviar dos vuelos que cubrían la ruta Barcelona-Valladolid, ya que la niebla no dejaba aterrizar en condiciones de seguridad. Según los datos facilitados por Aena a este periódico, en lo que va de año se han desviado cuatro vuelos por este motivo. Unas decisiones que no siempre tienen que ver con el que sistema ILS esté inactivo, sino que en ocasiones, cuando la niebla es muy densa, se puede desviar un vuelo pese a que esta tecnología esté en funcionamiento. Con todo, estos incidentes se han reducido a la mínima expresión tras la adquisición de este sistema, ya que en los años anteriores se llegaron a desviar hasta 180 vuelos en un año.

Se da la circunstancia de que el avión que se tiene que utilizar para hacer el calibrado del ILS está actualmente en revisión. Para que no se retrase su puesta en marcha, Aena se ha ofrecido a ceder una de sus aeronaves al Ejército, encargado de la gestión de la Base Área de Villanubla. El coronel de la Base Militar Félix Manjón agradeció al director del aeropuerto, Pedro San Martín, en declaraciones a la Cadena Cope, que haya «movido todos los hilos» para «acelerar» este proceso.