El grupo Konecta ha renunciado a sus planes de desescalada forzosa y desmantelamiento progresivo de la modalidad de teletrabajo, instaurada desde hace meses como consecuencia de la emergencia sanitaria provocada por la pandemia por el COVID-19, y ha dado marcha atrás, con lo que ha prolongado el teletrabajo como medida sanitaria para sus empleados. Según informó la Confederacón General del Trabajo (CGT) a través de un comunicado, el acuerdo tendrá una vigencia mínima hasta el 15 de marzo de 2021. Una vez cumplida esta fecha, si ambas partes lo acordasen, tras la evaluación de criterios sanitarios, el acuerdo podrá ser prorrogado, según informa Ical.

Fuentes sindicales informaron de que el pasado 8 de enero, la presión de la huelga convocada por los sindicatos de Konecta para llevar a cabo paros de una hora durante todos los lunes del mes de enero para protestar por la obligatoriedad de tener que acudir de forma presencial al puesto de trabajo. La marcha atrás del grupo de telemarketing se ha formalizado en la firma de un acuerdo “en el que prevaleció la prudencia” y por el que se garantiza que el teletrabajo se prolongará en el tiempo. 

En concreto, se ha acordado que quienes fueron llamados a realizar trabajo presencial en sus campañas, a partir del 1 de diciembre, el retorno a la modalidad de teletrabajo deberá realizarse en un plazo no mayor a 10 días, a partir de la firma de este acuerdo, mientras que para los otros trabajadores que estuvieran antes de aquella fecha, el retorno voluntario a los domicilios deberá ser gestionado antes del 31 de enero. Así mismo, mediante este acuerdo, los sindicatos han conseguido que el Grupo Konecta se comprometa a que el personal que voluntariamente, o por sus funciones o criterios de campaña, se hallase destinado en las plataformas, reciba los adecuados EPIS, entre ellos las mascarillas homologadas según la normativa y la autoridad laboral competente.