Ni siquiera es necesario computar la décima jornada de la Liga posconfinamiento (la número 37 de torneo):el cambio ya es más que una evidencia y el liderato del Real Madrid es el del equipo que mejor ha sabido adaptarse a las nuevas circunstancias. Ante la falta de entrenamientos de calidad, la acumulación asfixiante de partidos, el calor, las nuevas normas (los cinco cambios o la doble pausa para hidratación), el ejercicio de supervivencia fue el de saber adaptarse a los marcadores cortos, como lo demuestran las cifras:
· Los cuatro mejores equipos de la competición tras el parón (Real Madrid, Atlético, Barça y Villarreal) ganaron tres de sus nueve partidos con un marcador de 1-0. 
· Barcelona y Madrid se enfrentaron en este período al peor equipo de la categoría, el Espanyol: el resultado en ambos duelos, ganados por los grandes, fue de 1-0. 
· Solo en 15 de los 90 duelos disputados un equipo marcó tres o más dianas. 
· Antes del confinamiento se lograron 685 tantos (1,37 por equipo y jornada);después del confinamiento, la media ha bajado a 1,13. 
· El número de encuentros en los que al menos un combinado dejó la portería a cero se ha incrementado del 58,2 por ciento al 65,5 en la reanudación (59 de los 90 duelos).

Pinchazo azulgrana

Era el peor Barça en muchos años (más de una década) antes del parón: el que más partidos había perdido en 27 jornadas, el que menos goles había marcado, el que más goles había encajado... y sin embargo, a pesar de no haberle ganado ni un ‘clásico’ al Real Madrid, era líder. En un torneo a tumba abierta, tal vez su capacidad goleadora le hubiese salvado: era el único que promediaba más de dos tantos por encuentro. Sin embargo, en este ‘neofútbol’ se ha estrellado definitivamente. En las nueve jornadas tras el confinamiento, el cuadro culé marcó los mismos goles que los blancos y solo encajó dos más... números suficientes para sellar tres empates (ante Sevilla, Celta y Atlético), los dos últimos en condiciones similares: las de adelantarse por dos veces en el marcador y dejarse igualar (2-2 en ambos casos). Su incapacidad para sellar partidos de resultado apretado ha sido manifiesta a pesar de la mejora defensiva: dejó su portería a cero en seis de los nueve partidos. 

Regularidad blanca

A pesar de que uno de los rasgos del Madrid preconfinamiento era su irregularidad (ocho empates y tres derrotas en 27 encuentros), la clave de la voltereta ha sido paradójicamente su capacidad para mantener el ritmo tras el parón. Promediaba 1,8 goles a favor... y los sigue promediando. Había encajado apenas 0,6 por encuentro y ha logrado bajar a 0,3. Y sí, también ha estado (como el Barça) seis jornadas sin encajar en este período, pero ya tenía la labor hecha con tiempo: mientras los azulgranas han dejado su puerta a cero en 14 ocasiones, el combinado de Zidane lo ha hecho en 19. La gestión del marcador corto es prima hermana de la puerta a cero. 

Volteretas

De la clasificación de la liga posconfinamiento llama la atención el tremendo bajón que han dado equipos como Getafe o Real Sociedad, que pugnaban por la cuarta plaza antes del parón y apenas han sacado ocho de los 27 puntos en juego. En el lado contrario de la balanza, el ascenso meteórico de Atlético (que ha afianzado su billete para la Champions) y Villarreal, que estaba fuera de Europa antes del parón.