Corbyn promete un nuevo referéndum sobre el Brexit

Europa Press
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El Partido Laborista quiere que los derechos de los ciudadanos no sean usados como "moneda de cambio" en las negociaciones y reconoce la "ansiedad" que puede haber provocado el proceso para los tres millones de ciudadanos de la UE en Reino Unido

Corbyn promete un nuevo referéndum sobre el Brexit - Foto: PHIL NOBLE

El Partido Laborista de Reino Unido ha prometido que, si llega al Gobierno tras las elecciones del 12 de diciembre, promoverá un nuevo referéndum sobre el Brexit en los primeros seis meses de mandato y garantizará para los ciudadanos de la UE el "derecho automático" de residencia y trabajo sin necesidad de figurar en ningún nuevo registro.

El líder laborista, Jeremy Corbyn, ha presentado públicamente el "programa de la esperanza" con el que su partido aspira a imponerse a los conservadores en los próximos comicios, sobre los que se cierne de nuevo la sombra de la salida de Reino Unido de la Unión Europea, programada ahora para el 31 de enero.

El actual primer ministro, Boris Johnson, ha hecho del mensaje "terminar el Brexit" uno de sus grandes dogmas de campaña, pero para Corbyn solo se trata de un "fraude". "Su acuerdo de entrega será solo el principio de años de negociaciones interminables y promesas rotas", ha afirmado el dirigente opositor durante la presentación del programa, según BBC.

Corbyn quiere negociar un "acuerdo sensato", para lo cual su formación promete una "revisión" de los actuales compromisos que busque garantizar los derechos ciudadanos, una transición "apropiada" y el respeto a los compromisos internacionales, con especial énfasis en los Acuerdos de Viernes Santo que pacificaron Irlanda del Norte.

"Una vez hayamos asegurado este nuevo acuerdo, propondremos un referéndum vinculante que incluya la opción de seguir en la UE. Tendrá lugar en los primeros seis meses del gobierno laborista", reza el texto, que pone fecha a una de las grandes bazas con las que Corbyn aspira a llegar a Downing Street.

El Partido Laborista quiere, además, que los derechos de los ciudadanos no sean usados como "moneda de cambio" en las negociaciones. Así, reconoce la "ansiedad" que puede haber provocado el proceso para los tres millones de ciudadanos de la UE en Reino Unido y para los 1,2 millones de británicos en territorio comunitario.

La formación opositora plantea "garantizar a los ciudadanos de la UE el derecho automático a seguir viviendo y trabajando en Reino Unido". Solo tendrán que registrarse "para demostrar su estatus" si "quieren", un gesto con el que los laboristas quieren obtener también medidas "recíprocas" para los ciudadanos británicos residentes en otros países del bloque.

Por otra parte, también afirma que este nuevo acuerdo no incluiría cambios "en el estatus o la soberanía de Gibraltar", la única alusión que el Partido Laborista hace en todo el texto de su programa al Peñón.

 

"Corbyn no tiene un plan"

El Partido Conservador ha respondido a las propuestas por boca del viceministro de Interior Brandon Lewis, quien ha echado en cara a Corbyn que no sea más específico sobre sus planes en torno al Brexit. "La publicación del programa laborista nos ha confirmado lo que ya sabíamos: Jeremy Corbyn no tiene un plan para el Brexit", ha sentenciado en un comunicado, según la agencia de noticias Reuters.

Paradójicamente, es una crítica similar a la que los laboristas ya plantearon contra Johnson cuando, sin alternativas de por medio, criticaba el Acuerdo de Retirada negociado por el Gobierno de Theresa May.

El Partido Laborista, criticado en los últimos años por su ambigüedad en torno al divorcio entre Reino Unido y la Unión Europea, dedica al Brexit cuatro de las 105 páginas de su manifiesto. No especifica qué postura defendería en caso de que hubiese una segunda consulta, en contra por ejemplo del Partido Liberal Demócrata, que sí se ha posicionado a favor de la permanencia en la UE.

 

Otras promesas

Johnson ha acusado a Corbyn de planear dos referéndums para 2020, en alusión a la consulta ya confirmada sobre el Brexit y a una hipotética concesión al Partido Nacional Escocés (SNP) para volver a plantear la independencia de Escocia. El líder opositor, que se ha corregido a sí mismo en los últimos días sobre este tema, sostiene como última postura que no habrá ningún referéndum secesionista en al menos dos años.

El programa laborista pasa de puntillas sobre el tema, aunque el partido sí apunta que "la independencia escocesa sería devastadora en materia económica y no serían pocos los que pagarían el precio". "Escocia necesita una inversión transformadora de un gobierno laborista, no otro referéndum ni la independencia", explica.

El documento hace un especial énfasis en reformas y medidas de índole social, a las que el laborismo quiere agarrarse para remontar unos sondeos que les sitúan por detrás de los 'tories'. Una encuesta de Ipsos Mori publicada este martes por el diario 'Evening Standard' calcula una ventaja de 16 puntos porcentuales en favor del partido de Johnson.

En palabras de Corbyn, se trata de un programa "radical". "Estoy muy orgulloso de él porque tenemos que cambiar en este país", ha subrayado en su comparecencia, en la que ha abogado por una "transformación verde" de la economía y ha planteado nacionalizaciones en sectores como el ferroviario, el de agua, el de la energía o el de correros.

Corbyn ha querido erigirse en el defensor de la clase trabajadora, con promesas para elevar a "al menos 10 libras por hora" el salario mínimo y mensajes contra los "mil millonarios", a los que ha reclamado que asuman "una carga fiscal justa para ayudar a financiar servicios públicos de primer nivel".