Michelin fabricará sus neumáticos con materiales sostenibles

D. V.
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La empresa tiene el objetivo de que en el año 2050 su producción sea a base de materias renovables, recicladas y biomasa

Instalaciones de Michelin en Valladolid. - Foto: Ical

¿Qué puede hacer una empresa para ser sostenible? Esta pregunta se la hicieron hace años en Michelin, que ya fue pionera en el desarrollo de la tecnología radial, introducida hace más de 40 años y que permite reducir en un 30% la resistencia a la rodadura. Hace más de 20 incorporó la tecnología sílice, un compuesto en la banda de rodadura que disminuye en un 20% más la resistencia. En Michelin el cuidado del planeta es prioridad desde sus orígenes y forma parte de su estrategia de sustentabilidad, con el foco puesto en crear neumáticos más eficientes en términos de economía de combustible y más duraderos.

Para llegar a conseguir el objetivo de la sostenibilidad se dedican a trabajar en dos grandes áreas: el consumo de recursos naturales no renovables e el impacto en el medioambiente que generan los residuos, vertidos o emisiones.

Todo comienza analizando el ciclo de vida del neumático y creando un plan de acción en todas las fases.

En el ámbito de las materias primas, Michelin pretende sustituir las de origen no renovable por otras que sí que lo sean. Para ello trabaja en cuatro proyectos principales: BioButterfly, basado en la investigación en química vegetal para desarrollar y comercializar un proceso de producción de butadieno a partir de fuentes biológicas como la biomasa; Amyris, el desarrollo de un nuevo proceso para obtener isopreno (caucho natural) obtenido a partir de diferentes tipos de biomasa; el proyecto Bioimpulse, a través del cual se producirá una nueva resina adhesiva de origen vegetal; y mediante la tecnología HelioCompound utilizará aceite de girasol en la fabricación de neumáticos, en lugar de aceites sintéticos.

Además, Michelin cuenta con proyectos de reforestación de los bosques tropicales en el entorno de sus plantaciones de caucho natural para reducir el impacto en la biodiversidad y favorecer su producción de una manera responsable y sostenible.

Visión. Actualmente el 28% de las materias primas utilizas en la compañía son renovables y tiene como objetivo alcanzar en 2030 el 40% y en 2050, el cien por cien. Para cumplir este objetivo se basa en el concepto VISION presentado en 2017, un prototipo de neumático sin aire, conectado, recargable y ecológico.

Un neumático Michelin es un producto de alta tecnología compuesto por más de 200 ingredientes. El elemento principal es el caucho natural, pero también se encuentra caucho sintético, metal, fibras y otros componentes que refuerzan la estructura, como el negro de carbono, la sílice o los plastificantes (resinas). Combinados de la forma ideal, estos materiales interactúan para ofrecer el equilibrio óptimo entre prestaciones, facilidad de conducción y seguridad, al tiempo que reducen el impacto medioambiental del neumático.

Los conocimientos de Michelin en tecnología de materiales se deben a la fortaleza de sus capacidades de I+D, que se sustentan en las más de 6.000 personas que trabajan en siete centros de investigación y desarrollo en todo el mundo, y que dominan 350 áreas de especialización.

Menor impacto. El mayor impacto en el medioambiente no se da en el proceso de fabricación ni con los neumáticos fuera de uso. El 86% de las emisiones de CO2 se producen mientras el neumático está en el proceso de utilización.

La resistencia a la rodadura de los neumáticos es uno de los principales factores que incide en el consumo de carburante, que, a su vez, es responsable de las emisiones de CO2, lo que significa que cuanto menor sea la resistencia, se requiere un menor consumo energético y, como consecuencia, se generan menos emisiones de gases tóxicos.

Michelin apuesta por que en 2030 sus neumáticos hayan mejorado su eficiencia energética en un 10% respecto a 2020.

Por otro lado, para reducir la generación de residuos, fabrica neumáticos que garanticen sus prestaciones hasta el final de su vida útil, hasta el límite legal de 1,6 mm de profundidad de escultura, lo que permite ahorrar 400 millones de neumáticos al año y 35 millones de toneladas de emisiones de CO2.

Cuando los neumáticos llegan al final de su vida útil son recogidos y valorizados, cumpliendo así con obligación legal en España a través de la empresa SIGNUS de la que es socio fundador.

Michelin y enviro inician la construcción de una planta de reciclaje de neumáticos

Michelin ha iniciado la construcción de su primera planta de reciclaje de neumáticos. Para ello se ha establecido una empresa conjunta con Enviro, la compañía sueca que ha desarrollado y patentado una tecnología especial para recuperar el negro de humo, el aceite, el acero y el gas en el proceso de reciclado de los neumáticos usados.

La planta de reciclaje, situada en Chile, tendrá una capacidad de reciclaje anual de 30.000 toneladas de neumáticos de maquinaria de obra civil.

Esta nueva planta de reciclaje de última generación fomentará una economía circular mediante procesos innovadores. Los neumáticos usados se recogerán directamente en las instalaciones de los clientes para ser transportados hasta la planta, donde se trocearán para su posterior procesamiento.

Se prevé que el 90% de los materiales recuperados se reutilizará en productos fabricados a base de caucho, como neumáticos, cintas transportadoras o mecanismos anti-vibraciones.

Michelin lidera el proyecto BlackCycle de reciclaje

El innovador proyecto europeo BlackCycle, liderado por Michelin, tiene como objetivo crear, desarrollar y optimizar una cadena completa para la obtención de materias primas secundarias (MPS) a partir de neumáticos usados, destinadas a la fabricación de neumáticos nuevos y a otras aplicaciones industriales. El consorcio europeo para el desarrollo del proyecto BlackCycle está integrado por 13 entidades de 5 países: Francia, España, Alemania, Grecia y Suiza.

Con un presupuesto total de alrededor de 16 millones de euros, BlackCycle cuenta con una financiación europea de unos 12 millones de euros a través del programa Horizon 20201, ya que responde a la política de la UE respecto al cambio climático y la economía circular. El proyecto, primero de este tipo a nivel mundial, permitirá incrementar la valorización material de los neumáticos fuera de uso, aumentar el uso de materiales sostenibles en la fabricación de neumáticos nuevos y reducir el consumo de recursos fósiles.

Innovadora tecnología de reciclaje de residuos plásticos

Michelin y Pyrowave han llegado a un acuerdo de colaboración para industrializar una innovadora tecnología para el reciclaje de residuos plásticos. El acuerdo permitirá aplicar nuevas cadenas de valor en la economía circular de los materiales plásticos, lo que no sólo hará posible utilizar estos materiales reciclados en la fabricación de neumáticos nuevos, sino que podrán emplearse en otros sectores.

A diferencia de los procesos térmicos utilizados actualmente, la tecnología de Pyrowave permite reciclar el plástico y convertirlo en materia prima de alta calidad recurriendo a microondas. Este proceso no solo es más eficaz, sino que, al utilizar electricidad como energía en vez de las materias primas vírgenes procedentes del petróleo y del gas, ofrece un mayor potencial de descarbonización.