Igualdad en los Pucela-Celta

D.V.
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El cuadro vallisoletano se impuso en 12 partidos y perdió en 11, mientras que los otros 6 se saldaron con empates en los 29 enfrentamientos en la máxima categoría en tierras castellanas

Masip le paró un penalti a Aspas la pasada campaña (0-0). - Foto: R. GARCÁA

La historia dice que un Real Valladolid-Celta es un encuentro igualado. Al menos en cuanto a resultados con el Pucela como local. El cuadro vallisoletano se impuso en 12 partidos y perdió en 11, mientras que los otros 6 se saldaron con empates. Así que, el conjunto de Sergio González buscará ampliar los registros de victorias este domingo (18.30 horas).

En total, se han visto las caras 43 veces entre Primera (30), Segunda (12) y Tercera (1) con el Real Valladolid como local, con 20 triunfos, 10 empates, 13 derrotas, 69 goles a favor y 50 en contra, señala la web del Real Valladolid. Los últimos precedentes en LaLiga Santander favorecieron al Pucela, que ganó en la temporada 2013/2014, con un triplete de Javi Guerra (3-0), y en la 2018/2019, con tantos de Óscar Plano y Keko (2-1) para remontar el inicial de Pione Sisto; mientras que en el curso pasado el encuentro acabó 0-0, con un penalti parado por Masip en el tramo final.

El primer enfrentamiento entre los dos equipos se produjo en la temporada 1930/1931, en Tercera División. Aquel encuentro se saldó con empate (1-1). Hubo que esperar hasta la 1948/1949 para ver a ambos en la máxima categoría, donde se han visto las caras en 30 ocasiones.

En Primera, el Real Valladolid ha marcado 44 goles al Celta, mientras que el conjunto celeste ha anotado 39 en esos 30 duelos. Por otro lado, en Segunda el balance es más favorable para los blanquivioleta, con 8 victorias, 2 empates, otras tantas derrotas, 24 goles a favor y 11 en contra.

4-0 ha sido el mejor resultado que el Pucela ha obtenido en sus partidos frente al Celta en casa. Un marcador que se dio en la temporada 1961/1962, en Segunda, y en la 1985/1986, en Primera. Este último se produjo con Vicente Cantatore al mando, y un once inicial formado por Fenoy, Sánchez Vallés, Gail, Juan Carlos, Jorge Alonso, Moré, Minguela, Aravena, Yáñez, Torrecilla y Andrinúa. Estos cuatro últimos fueron los autores de los goles aquella tarde del 30 de marzo.