"Entorno a los 22.000 abonados". David Espinar, director del Gabinete de Presidencia, avanzó ayer la cifra de abonados que tendrá el Real Valladolid en su estreno en el José Zorrilla.

"Estamos muy contentos. El número global es una buena noticia. Pero además hemos batido un récord, aunque estamos para que la familia del Real Valladolid cada vez sea más importante e influyente, y que estemos la mayor cantidad posible de gente", explicó Espinar sobre el sentir del club por la marcha de una campaña de abonados que arrancó con polémica por los precios, hizo que la entidad rectificase y ha culminado con un nuevo récord histórico, sobrepasando los 20.000 fieles de la pasada temporada.

"Ha habido algunos problemas en la gestión, en la organización, y conforme se han ido dando los hemos explicado en las redes sociales. No ha sido perfecto el proceso, pero sí la reacción de nuestros abonados y estamos muy satisfechos de cómo ha ido la campaña", reiteró el director del Gabinete de Presidencia, que apuesta por un último impulso en la nueva Grada Foso. "Las vallas no taparán la visibilidad, que es uno de los temores; y hemos explicado qué tipo de butaca, el confort… el proceso está siendo fluido. Esperamos incrementar el número de abonados", dijo.