Una de las cinco máquinas de autoventa de la estación de tren Valladolid-Campo Grande lleva averiada más de un mes, según denuncian algunos de los usuarios. Concretamente, la que se utiliza para comprar billetes combinados a Madrid y para el cercanías en Chamartín. Renfe reconoce el incidente, que en un primer momento se produjo por una «avería» eléctrica ya reparada la semana pasada. Pero un nuevo fallo ha obligado a intervenir de nuevo al servicio técnico. «Estamos pendientes de que se repare», explican fuentes de la compañía.

Renfe también señala que esta máquina no es de las más utilizadas. Pero el problema se ve agravado porque estos usuarios no pueden comprar este tipo de billete en taquilla, de modo que se ven obligados a adquirir uno hacia Madrid y, una vez en Chamartín, comprar el de cercanías, con las molestias y pérdida de tiempo que esto supone. La compañía confía en que la avería se repare «en breve».