A finales de la pasada semana el Juzgado de Instrucción número 1 de Valladolid imputó a un sacerdote acusado de atentar contra la libertad e indemnidad sexual de una joven de 13 años, a la que, presuntamente, envió un vídeo con contenido sexual. Una noticia que se produce siete meses después de que la Archidiócesis de Valladolid creara una oficina para recoger denuncias de abusos sexuales a menores por parte de religiosos. Sin embargo, en todo este tiempo la oficina no ha recibido ninguna petición de ayuda, tal y como confirmaron fuentes del Arzobispado. Bien es cierto que eso no significa que no haya tenido actividad, puesto que sus integrantes han celebrado varias reuniones para afinar su protocolo de actuación en el caso de que tengan que prestar ayuda a alguna víctima. Actualmente trabajan en la elaboración de un reglamento y de un protocolo para la recogida de información. Además, estudian la puesta en marcha de otro proyecto que tiene que ver con el impulso de la prevención de estas conductas y la sensibilización acerca de este conflicto social. El portavoz de esta plataforma, Antonio Rodríguez, recuerda que esta oficina se creó para recoger denuncias e investigar cada caso de abusos sexuales a menores: «Nos ocupamos de orientar al denunciante y, en su caso, a la víctima, sobre en qué consiste la actuación procesal, tanto en la vía canónica como en la civil». La Iglesia decidió poner en marcha estas oficinas en varias provincias dado que está obligada por el motu proprio vos estis lux mundi del papa Francisco.
más vías de comunicación. La oficina está elaborando unas fichas de recogida de información que servirán para hacer estas denuncias y que se unen al teléfono 657769965 y al correo electrónico sava@archivalladolid.org.
Esta comisión es multidisciplinar y está integrada por el juez y ex presidente de la Audiencia Provincial, Feliciano Trebolle; el abogado de la Asociación Castellano y Leonesa para la Defensa de la Infancia y Juventud (REA), Antonio Rodríguez; el psicólogo Diego Velicia; la docente del proyecto Aprendamos a Amar del Instituto Desarrollo y Persona de la Universidad Francisco de Vitoria, Mónica Campos; y el sacerdote experto en Teología Moral, Roberto Pérez Briso-Montiano.