La crisis que atraviesa el sector turístico cobra un tinte más dramático al comprobar el impacto que ha tenido en la facturación de los negocios afectados. La alianza para la excelencia turística Exceltur, una asociación integrada por empresas de toda la cadena de valor del sector, ha publicado el Barómetro de la Rentabilidad de los Destinos Turísticos 2020, un documento en el que se detalle cómo ha evolucionado la facturación de los hoteles en todas las provincias de España. Y los de Valladolid no salen muy bien parados, si bien es cierto que el desplome es generalizado. La provincia anotó una caída de la facturación del 71,5 por ciento, frente al 77 por ciento nacional.
Precisamente son los hoteles de las ciudades con más tirón turístico los que más han perdido, en una lista encabezada por Palma de Mallorca (-87,6 por ciento) y seguida por Barcelona (-86,7) , Madrid (-81,2), Sevilla (-80,8), Santiago de Compostela (-78,9) y Granada (-78). Valladolid se sitúa en el puesto 17 de los 46 destinos urbano analizados.
Pero hay otro indicador alarmante para el sector en la provincia. Exceltur también ha analizado por separado la facturación de estos negocios en los meses de enero y febrero de 2020, antes de que se declarase el estado de alarma, y ahí Valladolid presenta los peores datos del país, con una caída del 13,3 por ciento, pese al buen comportamiento general. Es más, en esos dos meses los ingresos solo cayeron en siete provincias del país: Barcelona, Ciudad Real, Cáceres, Murcia, Las Palmas de Gran Canaria y Albacete, aparte de Valladolid.
Los cierres hacen mella. Algunos hoteles de la ciudad decidieron cerrar temporalmente sus instalaciones ante la falta de rentabilidad. Los costes de mantenimiento no compensan los escasos ingresos y por eso negocios como Tryp Sofía, Amadeus, Nexus Valladolid Suites y NH Ciudad de Valladolid decidieron bajar la persiana a la espera de tiempos mejores. Y eso también se ha reflejado en los datos de Exceltur. El año pasado se cerró con 919 plazas hoteleras menos, un 23,2 por ciento, aunque en este caso, Valladolid está entre las provincias que menos ha perdido. En Palma de Mallorca y Barcelona se han cerrado más de la mitad de las plazas.
Igual de alarmante es el ingreso medio por habitación disponible registrado en la provincia, que cayó un 50 por ciento hasta situarse en los 21 euros, el decimosexto más bajo del país.
Además, el problema no radica solo en la falta de clientes, sino que las circunstancias sobrevenidas han supuesto más gastos para los hoteles, tal y como denuncia el estudio de Exceltur: «La situación de incertidumbre, con aperturas parciales y cierres continuos ante las distintas olas que, además de las inversiones y sobrecostes para adaptarse a los protocolos de seguridad sanitaria, ha incrementado notablemente los costes operativos, haciendo que este balance sea incluso más negativo en términos de resultados. Además, Exceltur añade que «la evidencia de 17 meses acumulados sin ingresos en las ramas de actividad turísticas, singularmente dependientes de la movilidad y afluencia de visitantes, el incremento del endeudamiento de la empresas para hacer frente a la falta de liquidez, junto a la falta de visibilidad de horizonte de reapertura y reactivación, han colocando en una situación de extremo riesgo de desaparición a parte del tejido empresarial turístico, huérfano de un ambicioso plan de apoyo y rescate con ayudas directas, más allá de expedientes de regulación temporal de empleo y más préstamos del Instituto de Crédito Oficial por parte del Gobierno de España».