Cuatro partidos, cuatro finales. Al Carramimbre CBC Valladolid cada vez le queda menos para finalizar la temporada regular y para certificar su puesto de playoffs en una temporada en la que dicho billete va a estar especialmente caro. Después de tres triunfos consecutivos, el conjunto carmesí ya suma 17 en total, una cifra que no es definitiva a día de hoy y a la que todavía hay que sumar otro par de ellas. Así, con el objetivo de hacerse con ellas cuanto antes y de prolongar la racha positiva, los de Paco García recibirán en Pisuerga (hoy, 20:45 horas) al tercer clasificado de la liga LEB Oro, un Liberbank Oviedo que no para de crecer temporada tras temporada.

Los asturianos llegan a la cita en una meritoria tercera posición con 20 victorias y con el factor cancha prácticamente asegurado. El conjunto de Javi Rodríguez, que ha sumado ocho triunfos en los últimos nueve encuentros, será la primer final para un Carramimbre que no quiere perder, en la recta final, el billete de playoffs que se ha ganado a lo largo del curso.

Mientras que el Carramimbre anhela de manera imperiosa conseguir una de las últimas plazas de playoffs que se está jugando con varios equipos, Liberbank Oviedo tiene marcado entre ceja y ceja conseguir la segunda plaza que actualmente ostenta RETAbel Bilbao Basket. Los de Javi Rodríguez cuentan en sus filas con jugadores de auténtico talento como Óliver Arteaga, Davis Geks o Roope Ahonen, además de una rotación de entidad.

El veterano pívot canario es el baluarte de la pintura de Liberbank Oviedo y promedia 13 puntos por partido, 7,5 rebotes y una valoración media de 19,5; mientras que el letón Davis Geks anota 9,3 tantos por encuentro, 1,2 asistencias y un porcentaje medio de acierto del 41 %, lo que supone una gran amenaza en el perímetro. El tercer hombre destacado, que no el último, es el finlandés Roope Ahonen, que con un 52,8% de media en triples y 11,9 puntos por encuentro, es otro peligro extra a tener en cuenta más allá del arco.

En definitiva, choque durísimo para las ardillas que va a medir su verdadero potencial y sus aspiraciones de cara a la fase final de ascenso a la liga Endesa, donde la comunión entre equipo y afición debe ser clave para encarar esta última recta para demostrar que el sueño del playoff no se va a ir al traste después de acariciarlo todo el año.