Hermanos de caldo, leña y asfalto

Óscar Fraile
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El ambiente de fraternidad y compañerismo en la tónica entre miles de 'pingüinos' que llegan de toda España y otros puntos del mundo

Hermanos de caldo, leña y asfalto - Foto: Jonathan Tajes

La Real Academia de la Lengua define la palabra ‘pingüinera’ como el «lugar de la costa donde los pingüinos se reúnen en la época en que hacen los nidos y en la de la cría».  La Antigua Hípica no tiene costa, ni falta que hace, pero una vez al año, cuando el frío más aprieta, se convierte en una enorme pingüinera de aficionados a las motos. No acuden porque sea época de cría (allá cada cual), pero sí para levantar sus nidos en forma de tiendas de campaña y carpas. Y una vez que el campamento está instalado, los vecinos de tienda se convierten en colegas, y del colegueo a la amistad duradera hay un paso. «Aquí compartimos todo, llevo 20 años viniendo y jamás he visto una pelea, y creo que en la vida cotidiana nos tendríamos que comportar del mismo modo», asegura José Miguel Dilla, aficionado llegado desde Madrid y que, de algún modo, apadrina a Christian Lastra, llegado por primera vez desde Palma de Mallorca. «Es su primera vez y rápidamente hemos hecho amistad», señala.

A unos metros de distancia un grupo de hombres y mujeres combate el frío con chupas de cuero, gorros... y mucho trabajo. Se afanan en apilar leña y levantar la estructura de una carpa que servirá de refugio durante todo el fin de semana. Son integrantes de la International Police Association (IPA), que desde hace ocho años reúne a agentes de todas las partes del mundo en un cuartel general preparado por las agrupaciones de Palencia y Valladolid. El presidente de la palentina, Luis Ángel Espeso, está acostumbrado a recorrer concentraciones moteras y no duda al decir que Pingüinos es la mejor. «Aquí damos cobertura a todos los socios de IPA España y el extranjero que quieran venir a tomar un caldo caliente y tener un sitio donde guarecerse». Por allí pasan unas 400 personas en los cuatro días.

Quizá con menos infraestructura, pero con el mismo entusiasmo, montan su tienda de campaña justo al lado Álvaro Sánchez, Alejandra García y Cristina Nieto. Ellos son el mejor ejemplo de la parte más gamberra de la concentración. Es su primera vez y llegan desde Albacete de forma casi improvisada. «Es muy conocida y al ver que había salido las inscripciones dijimos... pues venga», reconoce Nieto. Y ya que vienen, se han preparado a conciencia. Al menos en lo que a indumentaria se refiere. Los tres montan su tienda de campaña con un gorro de pingüino y una bandera de la concentración.

Hermanos de caldo, leña y asfaltoHermanos de caldo, leña y asfalto - Foto: Jonathan TajesEllos, como otros tantos, están encantados de compartir afición, caldo y leña con quien sea preciso. Y así lo hacen. Como el Komando Miramoto, unos 25 amigos de distintos puntos de Valladolid que han convertido Pingüinos en su ineludible reunión anual. Esa en la que nadie puede fallar. «Aprovechamos para estar juntos, es nuestro punto de unión donde no falla nadie», explican David y Jorge. Y aunque se quejan de la calidad de la leña que reparte la organización, creen que las instalaciones son más que correctas.

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Hermanos de caldo, leña y asfalto - Foto: Jonathan Tajes
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Hermanos de caldo, leña y asfalto - Foto: Jonathan Tajes

Todos estos momentos hacen que valga la pena combatir un frío que se mete hasta el tuétano. Al final y al cabo, eso es lo más normal en cualquier pingüinera que se precie.