Notificada la condena al homicida de la pensión 'La Vienesa'

D.V.
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Asfixió a su novia con una almohada en una pensión de Valladolid en febrero de 2021, hechos que el propio autor había confesado y por los que ya había llegado a una sentencia de conformidad

El crimen se produjo en la pensión Vianesa, en la calle Montero Calvo.

La Audiencia de Valladolid ha notificado este lunes la condena de diez años de cárcel por homicidio impuesta al hombrer que asfixió a su novia con una almohada en una pensión de Valladolid en febrero de 2021, hechos que el propio autor había confesado y por los que ya había llegado a una sentencia de conformidad.

La Sección Segunda de lo Penal de la Audiencia de Valladolid ha hecho ahora oficial la sentencia que incluye la obligación del condenado de indemnizar a un hermano y un hijo de la fallecida con 20.000 y 90.000 euros, respectivamente, según la información del Gabinete de Prensa del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León recogida por Europa Press.

Inicialmente, las investigaciones apuntaban a posibles causas naturales ya que la víctima presentaba antecedentes médicos de bulimia, hipertensión, anemia, epilepsia y alcoholismo, de ahí que tuviera prescrito tratamiento con ansiolíticos, antidepresivos y antiepilépticos.

El condenado residía desde el 6 de enero de 2021 en el albergue municipal de Valladolid, dependiente de Cruz Roja, sito en el Paseo de Extremadura número 9 de Valladolid, centro al que el día 11 de mismo mes acudió la víctima, Priscila I.R.B, de 42 años, con la que inició una relación sentimental de pareja, sin convivencia.

Con posterioridad, el 28 de enero ambos abandonaron el albergue y se alojaron en la Pensión 'La Vienesa', en el número 1 de la calle Montero Calvo, donde alquilaron una habitación por un mes tras pagar un adelanto de 250 euros, de un total de 350, que abonó la fallecida.

Fue el día 3 de febrero, tras adquirir en un supermercado una botella de cava y fuet, la pareja regresó sobre las 20.50 horas a la habitación del hostal y, sin poder determinar la causa, inició una discusión en cuyo transcurso forcejearon y en un momento dado él asfixió a Priscila con una almohada.

Tras ello, el autor del crimen dejó a la víctima en la cama, la tapó con una sábana y una manta y le colocó la almohada encima de la cabeza. Salió de la habitación en torno a las 00.20 horas, cerró con llave la puerta desde el exterior y abandonó el hostal cargado con una mochila de grandes dimensiones en la que introdujo el móvil de la fallecida cuya tarjeta cambió horas después.

 

VIAJE ERRÁTICO DE 1.700 KILÓMETROS

Siete minutos más tarde sacó 320 euros de su cuenta en un cajero de la Plaza de Zorrilla y horas después, sobre las 06.13 horas del 4 de febrero, abandonó Valladolid en dirección a Ávila para, a partir del día siguiente, iniciar un viaje errático de más de 1.700 kilómetros por diversas localidades de Castilla y León, Asturias y Vitoria, hasta que el día 11 de febrero regresó al albergue municipal de Cruz roja en la capital vallisoletana, si bien pernoctó en el exterior al no haber plazas disponibles.

El cuerpo de su novia no fue hallado hasta el 21 de febrero, cuyo hallazgo no fue dado a conocer por los medios de comunicación hasta dos días después. Para entonces, el autor del crimen había retomado una relación sentimental anterior con otra mujer con la que se alojó los días 27 y 29 de ese mes y el 1 de marzo en distintos hoteles de la capital vallisoletana, Palencia y Ávila.

En su intento de no ser localizado por la policía, desde el 8 de marzo el encausado realizó distintas maniobras consistentes en el cambio de número de teléfono asociado a su whatsapp y la venta de su teléfono móvil.