Julio Valdeón

A QUEMARROPA

Julio Valdeón

Periodista


Vacúnate

26/11/2021

Me despierto cada mañana en un barrio con pintadas exóticas contra la vacunación, que denuncian la supuesta trama mundial en favor de las farmacéuticas y atacan a los científicos y los sanitarios. Basura terraplanista. En un país donde la magufería goza de gran predicamento, sorprende para bien que las referida a las cuestiones científicas apenas goce de apoyos. El pavo del aerosol de mi barrio contrasta gravemente con el altísimo porcentaje de españoles vacunados. Frente a los austriacos, que serán inmunizados a la fuerza, frente a los votantes republicanos, que ganan 3 a 1 en muertes a los votantes demócratas, con unas cifras que calcan los índices de vacunación, los morenitos, meridionales, mediterráneos, hemos demostrado ser menos dogmáticos y más racionales. Ahora sabemos que la EMA acaba de autorizar las vacunas para los niños de 5 a 11 años. Una noticia grandiosa, que confirma todo lo apuntado en los ensayos clínicos. Las vacunas, con una tecnología revolucionaria, el Arn mensajero, funcionan como un disparo de salud. Funcionan entre los adultos y funcionan con los niños. Son seguras, protegen de la infección grave, la hospitalización y la muerte en unos porcentajes abrumadores. De paso, aunque no fueron elaboradas con el contagio en mente, también frenan la transmisión. De ahí que resulte esencial vacunar a los niños. Sin ese tramo de edades protegido será imposible alcanzar la inmunidad de grupo. Cuando los enemigos de la vacunación les cuenten que no hay ciencia detrás respondan que hemos superado los 7.820 millones de dosis inoculadas en 184 países, 34 millones de dosis diarias, que la gente no palma en masa por la aguja y que los que únicos que siguen entrando en los hospitales, conectados al goteo del oxígeno, son los alcornoques que renunciaron a siglo XXI, y al XX, incluso al XIX, así como quienes esperan a ver los efectos en sus vecinos para tomar una decisión de salud pública, casi una obligación cívica. Yo no sé si todavía falta un adulto por vacunarse, pero si lo hay, no lo duden. O vacuna o cajita de pino.