Alumnos del IES María Moliner alertan del frío en las aulas

R.G.R
-

El centro ha instalado 'barracones' en el patio para los estudiantes de cuatro clases de Bachillerato por falta de espacio en el edificio y, con la llegada de las bajas temperaturas, «no se calientan lo suficiente»

Instituto IES María Moliner de Laguna de Duero.

Alumnos de Bachillerato del Instituto de Educación Secundaria María Moliner de Laguna del Duero han elevado una queja formal a la Consejería de Educación por el «tremendo frío» que hace en las cuatro aulas prefabricadas donde estudian. 

El curso pasado, el centro no tuvo más remedio que adjudicar a los alumnos de primero y segundo de Bachillerato el turno de tarde como consecuencia de las limitaciones de aforo ocasionadas por la pandemia. Este año, se decidió instalar en el patio del instituto cuatro aulas prefabricadas para tres clases de primer curso de Bachillerato y una de segundo. Las aulas, parecidas a casetas de obra, están perfectamente equipadas y cuentan con bombas de calor, aunque no es suficiente. La Asociación de Padres y Madres del Colegio (Ampa) es consciente de la situación. «Las aulas prefabricadas y los protocolos de ventilación no son compatibles», asegura la presidenta, Consolación Roldán. 

Los padres afectados por el frío que pasan los alumnos en las aulas han presentado numerosas quejas ante de la dirección del centro, pero la respuesta ha consistido en que se deben mantener los protocolos marcados por el Ejecutivo regional para la prevención covid. El grupo de padres de los alumnos afectados ha ido más lejos y ha presentado un escrito de queja ante la Consejería de Educación, que ha tenido una respuesta similar. 

El centro se ajusta a los protocolos de ventilación y esto hace que el frío en las aulas sea prácticamente permanente. El director, Javier Román, indicó que no hace más frío que otros espacios del centro, ya que lo que se hace es seguir el protocolo marcado por la Consejería de Educación. 

Los alumnos están con las cazadoras puestas en las aulas, donde a primera hora de la mañana las temperaturas no sobrepasan a los 13 grados y última hora de clase llega a los 16. Al menos así lo afirma una de las madres que abandera la protesta, Elena Cortejoso. Expone que los alumnos no tienen más remedio que ir «muy abrigados a clase» y, a pesar de ello, no consiguen quitarse el frío de los pies durante toda la jornada. «El año pasado tuvimos que venir en turno de tarde y perdernos las extraescolares y este año tienen que estar en clase con los pies helados y pasando frío». 

Los padres no ven viable una solución para el presente curso y más teniendo en cuenta que ya han intentando que se produzcan cambios con resultado infructuoso. «Entran a las ocho y media de la mañana y la calefacción se enciende cuando llega el conserje, que también ventila y así es muy difícil que la clase pueda entrar en calor». 

No obstante, la presidente de la Federación de Padres y Madres de Alumnos de Valladolid, María Capellán, destacó que no se han presentado más protestas de este tipo en otros centros de la provincia. «El año pasado sí tuvimos muchos problemas, pero en este curso de momento no hemos tenido quejas en este sentido».