El Carramimbre CBC Valladolid, movido por su deseo de jugar los playoffs, se apuntó su segundo triunfo consecutivo después de imponerse a un combativo ZTE Real Canoe (96-79) en Pisuerga. Los de Paco García firmaron una muy buena primera parte y supieron sufrir en la segunda para mantener su plaza en los puestos de promoción y mejorar, a falta de cinco jornadas, el registro de la campaña pasada.
Aprovechando el impulso tomado en Granada con la última victoria, el Carramimbre, con más frescura que las últimas semanas, encauzó el partido desde los compases iniciales. Un inicio fulgurante y un gran acierto desde la larga distancia supuso un parcial de 15-3 en apenas cinco minutos que obligó al conjunto visitante, ZTE Real Canoe, a pararlo antes de que la sangría fuera demasiado amplia.
Y el efecto para los madrileños fue inmediato, aunque el Ciudad de Valladolid continuó martilleando el aro a base de triples. Un parcial de 7-15 redujo parte de la diferencia, aunque los vallisoletanos, liderados por Óscar Alvarado en la dirección (ocho asistencias en el primer periodo) y Álex Reyes en la anotación (11 puntos), se anotaron el cuarto inaugural (27-22). Los amarillos, sin Tyson Pérez, el MVP de la competición, iban a tener que
De nuevo, los de Paco García comenzaron el periodo mejor que su rival y endosaron a los amarillos otro parcial de 13-4 (40-26), con una técnica contra el banquillo incluida, que inclinó otro poco la balanza a favor de las ardillas.
Sin embargo, una serie de controvertidas decisiones arbitrales sembraron el desconcierto en Pisuerga y se enfrió completamente el ritmo del partido, algo que no benefició al cuadro carmesí. Aun así, la buena labor de la segunda unidad y los puntos que siguió sumando Álex Reyes (15 puntos al descanso con cuatro de cuatro en triples), permitieron al Carramimbre seguir mandando (51-39) antes de retirarse a vestuarios.
Las 14 asistencias que registraron los vallisoletanos contrastaban enormemente con las dos que sumaron los madrileños en la primera mitad y explicaban, en buena medida, las diferencias en el marcador. La buena circulación de los pupilos de Paco García, a su vez, supuso un gran 7/12 desde la larga distancia que había lanzado a un Carramimbre que aún iba a tener que sudar para dejar la victoria en casa.
ZTE Real Canoe subió una marcha y apretó la contienda nada más comenzar la segunda mitad. Los de Miguel Ángel Aranzábal aprovecharon los problemas de faltas en los interiores locales para hacerse fuertes en la pintura y creer en sus opciones a raíz de un 11-18 de parcial que rompió Óscar Alvarado con un triple balsámico. El Carramimbre, no obstante, empezó a acusar el cansancio con el paso de los minutos y sin los puntos de Álex Reyes sufrió enormemente para mantener el mando después de un fatídico tercer cuarto (14-25) en el que la renta de la primera mitad quedó totalmente dilapidada (65-64).
Al Ciudad de Valladolid le tocaba sudar en los últimos diez minutos para dirimir un encuentro que parecía encarrilado después de gozar de hasta 17 puntos de ventaja, pero los de Paco García demostraron que aún tienen casta y baloncesto para seguir cosechando triunfos, a pesar de que ya tenían el miedo en el cuerpo. Los carmesí resistieron los envites de un Canoe diezmado que no llegó a ponerse nunca por delante, pero que tampoco se despegó hasta los últimos minutos a pesar de las bajas y los problemas físicos que lo lastraban.
El Carramimbre se bajó al barro y se encomendó a Sergio de la Fuente para no tirar en tres minutos (83-75) todo lo peleado en los 37 anteriores. La buena labor del ala-pívot vitoriano, que consiguió varias canastas y rebotes providenciales, permitió despegarse en el marcador para terminar sentenciando con un triple de Óscar Alvarado (86-75) con dos minutos por disputarse. A pesar del serio aviso de Canoe en el tercer periodo y durante el comienzo del último, los de Paco García metieron la directa hacia el triunfo sin más sustos que los ya vividos (95-78).