El alcalde de Valladolid, Óscar Puente, se reunirá el próximo con la presidenta del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif), Isabel Pardo de Vera, y el secretario de Estado de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Pedro Saura, para analizar la evolución de los proyectos pendientes, entre ellos, el túnel de la calle Andrómeda de la ciudad. De hecho, Puente explicó esta semana que, de momento, no tiene ninguna novedad más sobre la marcha de los trabajos de construcción del túnel de Andrómeda, más allá de los conocidos y vinculados a la falta de hormigón.
No obstante, el regidor confió en abordar esta obra y otros proyectos con la presidenta de Adif, con la que se reunirá la próxima semana, junto al secretario de Estado de Transportes. De hecho, fuentes consultadas por El Día de Valladolid apuntan que la versión de Adif es que tanto las obras de Pilarica como las de la variante de mercancías podrán cumplir los plazos previstos a pesar de los últimos percances. En el caso del ‘by-pass’ se asegura que se licitará nuevamente el contrato que se suspendió por un «error», mientras que en el caso del túnel de Andrómeda la solución se antoja más compleja por los problemas con el suministro del hormigón «específico» para iniciar la construcción de los muros pantalla. Unos problemas que abordó esta misma semana el concejal de Planeamiento Urbanístico, Manuel Saravia, que viajó a la capital para reunirse con responsables de Adif, pero no se ha anunciado ningún avance o solución.
Eso sí, ante este cúmulo de problemas con dos obras vinculadas al proyecto de integración ferroviaria, desde el Ayuntamiento se pide confianza. De hecho, el alcalde confía que el papel del director general de la Sociedad Alta Velocidad, Antonio Gato, permitirá que los retrasos que sufren las obras del túnel de la calle Andrómeda no se repitan en los proyectos de pasos para la integración ferroviaria. Puente reconoce que lo que sucede con los trabajos de Andrómeda, cuyo inicio ya se demoró por problemas con las conducciones de servicios, le hace «temblar el cuerpo», pero reitera que para las obras del proyecto de integración «está la SVAV» y un gerente «al que se ha puesto al frente, para estar encima y que las cosas vayan a toda pastilla».