Alfonso González Mozo

PLAZA MAYOR

Alfonso González Mozo

Periodista


Qué pronto se olvida todo

09/05/2020

La ‘nueva normalidad’ que Pedro Sánchez augura para finales de junio es toda una oda a la incógnita. Las dudas son tantas que las pocas certezas que se han ido poniendo sobre el papel del BOE se difuminan entre las cifras diarias de contagios y fallecidos, entre incómodas mascarillas y ridículos guantes, entre horarios para salir a la calle y entre esos dos metros de barrera social que algunos han parecido olvidar a las primeras de cambio. Como si los casi dos meses de confinamiento hubiesen sido solo un mal sueño, como si la gente no siguiera muriendo en soledad y los hospitales no se hubiesen transformado en auténticos hospitales de guerra. Qué pronto se olvida todo.
La pandemia sigue entre nosotros, aunque ya podamos salir a correr y dar un paseo cada tarde. No podemos olvidar, no nos podemos permitir relajarnos justo ahora. Cada uno ha de ejercer su responsabilidad. Y esto no va de mascarillas y guantes mientras vamos con los niños por la calle, va de mantener la distancia física, porque, según dicen los expertos, esto resulta clave para la contención de un virus tan silencioso como éste, capaz de propagarse escondido entre decenas de asintomáticos.
Tiempo habrá de buscar culpables, de que la ciudadanía ponga las cosas en la balanza y y decida qué parte de culpa tienen nuestros dirigentes y qué había de imprevisible en esta crisis sanitaria. Si toca disculpar las múltiples rectificaciones y vaivenes que hemos vivido o hay que pedir responsabilidades por pensar que Italia estaba demasiado lejos como para preocuparnos por la llegada del coronavirus chino.
Todo a su tiempo, sin olvidar, pero ahora todavía no es el momento. Porque seguimos sin tratamiento ni vacuna y quién sabe si el maldito virus se está rearmando para volver a la carga en otoño. Por eso toca seguir unidos y tratar de preparar al país para otro envite del ‘bicho’. Planes de actuación concretos en cada sector, precisión para organizar hospitales, centros de salud, colegios... y capacidad para pagar los ERTE en tiempo y forma. España tiene que seguir con las defensas activadas y que la covid-19 no vuelva a pillarnos en un estadio de fútbol o de ‘mani’.
Mientras tanto, a ‘desescalar’ despacito y sin prisa. Nos jugamos el verano, uno rarísimo, sin empujones en el chiringuito ni apreturas en la playa, pero también nos valdrá.?