Clamor por el «pésimo estado» de la carretera N-601

R.G.R
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Los vecinos de los pueblos lamentan el «abandono» que sufre la carretera Valladolid-León y piden mayor esfuerzo inversor para acometer la autovía

Clamor por el «pésimo estado» de la carretera N-601 - Foto: Jonathan Tajes

Muchos años sin que se lleve a cabo una obra importante de mejora  a expensas del avance de la futura Autovía a León están dejando en un «estado de abandono» la carretera nacional 601 desde que finaliza el tramo de autovía en Peñaflor de Hornija hasta el límite provincial con León. La antigua nacional es un bache continuado, donde coches y camiones tienen que soportar molestias y ruidos constantes que hacen sufrir a los amortiguadores y que hacen incómoda y peligrosa la conducción durante muchos kilómetros. 

Los vecinos de los pueblos lo saben de sobra. Lamentan que los gobiernos no apuesten por la construcción de la autovía con mucha más celeridad y soportan a diario el mal estado del firme, que ocasiona problemas e inconvenientes en todos los desplazamientos. 

La calzada está parcheada durante todo su recorrido. Hace «más de una década» que no se realiza una intervención integral del trazado y los arreglos del pasado se han convertido en los baches de hoy en día. Los vehículos van en continuo movimiento durante el viaje en ambos sentidos, ya que las dos partes de la calzada se encuentran en un estado similar. Falta de brea, baches, parches, borrado de la pintura en la señalización horizontal...

Los problemas comienzan ya en el tramo de autovía existente hasta Villanubla. Las reparaciones y los parcheados han llegado hasta estos poco más de 16 kilómetros y ya en la conocida como subida a Zaratán los vehículos tienen que sufrir baches de diversa índole, pero la situación empeora de forma considerable nada más entrar en la vieja carretera. Los problemas aparecen enseguida en forma de baches, que casi son socavones en algunas partes. 

La peor zona antes de llegar a Medina de Rioseco llega en los pocos más de dos kilómetros del tramo de radar de velocidad en la conocida como cuesta de los coruñeses, donde los baches se acentúan y los parches colocados también, y se convierte en un peligro junto con las curvas y la pendiente. 

Es solo el principio. En la misma travesía de Medina de Rioseco los baches, las grietas y los parches copan gran parte de la calzada. Y lo peor casi llega desde la Villa de los Almirantes hasta la localidad de Berrueces. En poco más de diez kilómetros la brea de la calzada casi desaparece. Las rodaduras hechas por los vehículos se pueden observar claramente, ya que están en una tonalidad diferente al resto y la carretera es un bache permanente. Si bien es cierto que la pintura perteneciente a la señalización horizontal está en buenas condiciones, las grietas y los baches son permanentes. 

Los vecinos de la zona lo sufren a diario y ven la peligrosidad. Jesús Martínez viaja con mucha frecuencia entre Madrid y Mayorga. «Está mal parcheada y es muy molesto en el interior de los coches. La última obra grande sería hace más de diez años, me parece una vergüenza». José Manuel Juanes es transportista jubilado. Acude casi a diario desde Mayorga a Medina de Rioseco. «Lleva muy mal dos años. El motivo es que no se realizan reparaciones, no la tocan y al final se ha estropeado». ?

desde benafarces. El tramo entre Benafarces y Mayorga no mejora en absoluto y en algunas zonas el asfalto desaparece por completo. Una calzada que cambia de carril en su totalidad. Un problema que no es nuevo. El deterioro se ha ido produciendo con el paso de los años, sin que el Gobierno haya hecho nada por el momento. Las grietas son más que visibles en las travesías de Becilla de Valderaduey y en la propia Mayorga, donde el estado del firme empeora. «Es una pena, está todo mal. Yo lo sufro por trabajo y está todo igual. Va empeorando con el paso del tiempo y ahora está horrible», comenta Valentín Estévez, quien conduce a diario una ambulancia por esta zona. Justiniano Valdivieso vive junto a la carretera en Mayorga. «Hace más de diez años que no se reforma. Pequeñas actuaciones se hacen todos los años, pero está muy mal. Hay mucho bache».

Así, miles de conductores sufren a diario el estado del firme de la N-601 a la espera de que el Gobierno acelere la construcción de la futura autovía, aunque para 2022 únicamente se han destinado poco más de 700.000 euros, lo que imposibilita un avance significativo.