Valladolid vuelve a situarse como una de las provincias con los menores incrementos salariales del país. Según los datos del Ministerio de Trabajo y Economía Social, las subidas pactadas en los convenios de 2020 se situaron en el 1,65 por ciento, por debajo del 1,89 por ciento nacional. Además, se trata del incremento más moderado de la Comunidad, junto al de Burgos, y el noveno más bajo del país a nivel provincial.
Unos datos que llegan después de un año atípico, en el que gran parte de los procesos de negociación han estado paralizados por el impacto de la pandemia. Además, las negociaciones que se han llevado a cabo no han sido con el mejor escenario para pactar subidas generosas, dada la incertidumbre que ha generado la pandemia en la mayoría de los sectores.
Tanto es así que la actualización de las tablas salariales no tiene nada que ver con la de 2019. En el ámbito nacional se ha pasado de una subida del 2,33 al 1,89 por ciento. La misma tendencia registrada en Valladolid: del 1,87 al 1,65. Y todo ello pese a que la jornada media pactada en esos mismo convenios aumentó en Valladolid en cinco horas el año pasado, al pasar de 1.748 a 1.753 horas.
El secretario de Política Sindical, Industrial y Empleo de UGT Castilla yLeón, Raúl Santa Eufemia, reconoce las dificultades del pasado año y asegura que en esos datos tiene mucho que ver el peso que tienen en Valladolid sectores como el comercio y la hostelería, dos de los grandes golpeados por la pandemia, y tractores de otras actividades. Además, es consciente de que las subidas que se han podido pactar en otros convenio han sido «paupérrimas», de modo que considera que este año «es necesario» retomar las negociaciones para cambiar estos datos y para desbloquear algunas que llevan bloqueadas mucho tiempo. Es el caso del convenio de la hostelería, que acabará resolviéndose en los tribunales a finales de este año. Por su parte, el secretario de Acción Sindical de CCOO Castilla y León, Fernando Fraile, recuerda que la negociación colectiva prácticamente quedó «frenada en seco» en el mes de marzo del año pasado, después de los 16 convenios publicados en la Comunidad en el primer trimestre. «Aquí la patronal tiene que asumir su responsabilidad porque desde ese mes se ha negado a retomar la negociación de los convenios colectivos pendientes y a constituir las mesas de negociación, utilizando la crisis sanitaria como una coartada», señala.
Sectoriales y de empresa. Los datos del Ministerio también demuestran que los incrementos que los trabajadores han conseguido en los convenios sectoriales son mucho más generosos que en los de empresa: un 1,71 en el primer caso y un 1,17 en el segundo.
Se da la circunstancia de que en los últimos días la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, se ha referido a las negociaciones sobre los cambios en la reforma laboral para anticipar que se busca dar prioridad a los convenios sectoriales frente a los de empresa. Así, en una propuesta ya enviada a los sindicatos y la patronal, el Gobierno busca prohibir que las retribuciones de los convenios de empresa puedan estar por debajo de las sectoriales, y que no se pueda utilizar la subcontratación para encadenar contratos temporales.
«Hemos venido reclamando que esto se lleve a cabo porque el convenio de empresa debe complementar al sectorial, pero nunca debe empeorar las condiciones de trabajo», señala Fraile. Santa Eufemia añade que la priorización de los convenios de empresa frente a los sectoriales se fijó en la reforma laboral de 2012, y apuesta por acabar con este sistema. También pide que se afronten convenios de nuevos nichos de empleo, como el de los riders y los generados por las plataformas digitales.