La Entidad Pública Empresarial Agua de Valladolid (Aquavall) cumple en julio cuatro años desde su constitución. ¿Qué balance hace de este periodo de tiempo?

La verdad es que hacemos un balance muy positivo. No ha sido un camino fácil, pero estos años han constatado que la remunicipalización era posible y que se ha producido sin mayores problemas para la ciudadanía, a pesar de los augurios de quienes se oponían. Como solemos decir medio en broma, la gente abre el grifo en casa y sigue viendo cómo sale agua, ha sido una transición suave y normal, no podía ser de otra manera. La concesión terminó en julio de 2017 y el Ayuntamiento decidió democráticamente recuperar la gestión que ya había tenido a través de una nueva entidad pública expresamente creada. Aún así, el cambio ha supuesto un esfuerzo enorme para los profesionales que forman parte de Aquavall y de la Concejalía de Medio Ambiente, que se han volcado en lograrlo. Sin ellos no habría sido posible.

Las tarifas, que ya eran previamente de las más baratas de España, se han mantenido exactamente igual, incrementado las bonificaciones por razón de renta. Somos un referente en responsabilidad social, con un fondo específico covid-19 para fomentar ayudas a personas y PYMES.

Siempre hemos entendido que es fundamental la aplicación de la Responsabilidad Social y Medioambiental para colaborar en el cumplimiento de los Objetivos del Desarrollo Sostenible (ODS) y aportar valor a la sociedad en su conjunto.

Por otro lado, se ha invertido más en los últimos años, desde la municipalización, que en los 20 años de concesión privada. Y aporto un último dato que avala el modelo público: los gastos de gestión en 2015, con la empresa privada, ascendieron a 18.948.023 euros. Para dar el mismo servicio Aquavall tuvo un gasto en 2019 de 14.670.184 euros. Es cuatro millones más económica la gestión pública, y eso es capacidad inversora para renovar una red que sufre averías porque debió ser cambiada hace 20 años.

En estos casi cuatro años se han licitado 31 millones desde que la gestión es pública,una cantidad que contrasta mucho con la etapa anterior de privatización cuando se invirtieron 27 millones en 20 años. ¿Cuáles han sido las principales líneas de actuación en este tiempo?

Podemos destacar obras como el colector de refuerzo de la avenida de Gijón y la sustitución del colector de la margen izquierda del paseo de Zorrilla, que actualmente se encuentra en ejecución.

De cara a mejorar la calidad del agua, se han renovado los filtros de arena y carbón en la planta potabilizadora de Las Eras, se han reformado los depósitos de San Isidro y se ha realizado la toma de emergencia de Boecillo.

Aquavall ha enumerado entre las acciones realizadas los últimos años la mejora de la eficiencia energética mediante la reforma de la plata de cogeneración de la estación depuradora de aguas residuales del Camino Viejo de Simancas, la sustitución de tuberías de biogás o los dos soplantes en la misma depuradora.

¿Qué ventajas ha podido notar el ciudadano en la municipalización de este servicio?

Los ciudadanos y ciudadanas de Valladolid siguen teniendo los mismos servicios de suministro, alcantarillado y depuración que antes, pero a medida que vayamos ejecutando las inversiones la ciudad contará con unas infraestructuras menos propensas a averías, reventones, cortes de suministro e inundaciones, que tantos problemas producen en los edificios y los barrios que los sufren.

Además, hemos aprobado importantes bonificaciones fiscales para las familias más vulnerables, porque creemos que el acceso a los recursos básicos no puede suponer ninguna dificultad por motivos económicos. Poco a poco estamos dando la vuelta al modelo de gestión, centrándonos en el derecho al acceso y la redistribución de la riqueza.

Uno de los principales trabajos es la renovación de las tuberías ¿en qué punto se encuentran?

En los tres años y medio de funcionamiento de Aquavall se han licitado nada menos que 31 millones de euros en inversiones. De las cuentas anuales y el programa plurianual, cabe destacar que la Entidad obtuvo un margen de explotación de 17.256.107 euros en el ejercicio 2019, cifra que se destinará íntegramente a la inversión en las redes e instalaciones del servicio de agua sin subir las tarifas de los usuarios y conservando las bonificaciones sociales. El importe de las inversiones realizadas en lo que va de año asciende a 9.118.134 euros.

Es de destacar la buena marcha económica de la Entidad Pública, que está acompañada por un buen ritmo inversor que al final del difícil año 2020 conseguirá que se cumplan las previsiones.

El total adjudicado en el ejercicio 2017-2020 asciende, aproximadamente, a los 33,5 millones de euros.

¿Hay alguna zona que preocupe más? Existen en Valladolid aún 230 kilómetros de tubería de fibrocemento.

El 30 por ciento tiene una antigüedad superior a los 40 o 50 años. Este material dejó de instalarse en Valladolid en 1992 y se prohibió su uso en España 1996. Por ello, desde Aquavall se seguirá avanzando con el plan de inversiones y de renovación para mejorar la calidad de todos los elementos del servicio de agua.

Se ha reestablecido el servicio de las fuentes de agua potable para garantizar el acceso a todos los ciudadanos en la vía pública de cara a la llegada de la primavera, ¿cómo han sido estos trabajos?

Como en todas las materias hay que agradecer a los trabajadores de Aquavall su enorme esfuerzo. Durante tres semanas, aproximadamente, se han abierto las 360 fuentes repartidas por la ciudad. El objetivo no es otro que garantizar el acceso a todos los ciudadanos en la vía pública de cara a la llegada de la primavera, el aumento de temperaturas y por lo tanto el incremento de necesidades de hidratación de la población.

Durante los últimos meses, las fuentes han permanecido inactivas como una de las medidas acordadas para evitar la propagación de la covid-19. Las peticiones que nos han llegado desde la ciudadanía, los avances en el proceso de vacunación y la evolución de la pandemia, así como los consejos de expertos sanitarios consultados, han motivado la decisión de esta reactivación del servicio.

Los servicios técnicos de Aquavall están revisando el estado de cada una de las fuentes para comprobar su correcto funcionamiento y en las que se han detectado problemas se procederá a su reparación lo antes posible.

¿Cómo es la calidad del agua que tenemos?

El agua del grifo de Valladolid tiene unos estándares de calidad muy superiores a las recomendaciones de las autoridades sanitarias, avalados por los más de 3.000 análisis que se realizan anualmente en la red de suministro, donde se analizan más de 27.000 parámetros.

¿Cuáles son las razones por las que se recomienda a los ciudadanos consumir agua del grifo en lugar de embotellada?

De acuerdo a cientos de estudios de todo el mundo, el agua de grifo que sigue la normativa de agua potable de la OMS es igual de saludable que el agua embotellada. El agua de Valladolid sigue esta normativa y hacemos constantes controles para garantizar que el agua que sale por el grifo cumple con todos los parámetros sanitarios. Con el agua de grifo, el impacto medioambiental es cercano a cero, frente a las aguas embotelladas que generan residuos plásticos que contaminan el medio ambiente.

Estudios indican que se generan 2.130 botellas al año de cada familia. Si nos ponemos a multiplicar por vecinos de Valladolid estamos hablando de 16 millones de botellas al año. Menos mal que muchos ya sois asiduos al agua del grifo… Y tenemos que ser muchos más. El agua de grifo de Valladolid cuesta menos de 0,16 cent/l. según la OCU. El agua embotellada desde 20 céntimos/litro, haciéndola 120 veces más cara (o más). Para el ejemplo que hemos puesto antes, el consumo de una familia durante todo el año equivale a 5,1 euros frente a los 620 euros que costaría embotellada en el caso de las más económicas.

¿Qué acciones se están llevando a cabo para que este mensaje esté en entre los ciudadanos?

El compromiso social forma parte de nuestro sentido de responsabilidad y encaja firmemente con nuestros valores como entidad pública. Creemos firmemente en la suma de esfuerzos nos ayuda a avanzar dentro de una sociedad moderna. Como el agua, nosotros también debemos llegar a toda la sociedad, compartiendo con ella sus necesidades y sus prioridades, por lo que hemos firmado convenios de colaboración con múltiples entidades de toda índole y colectivos sociales de Valladolid.

En Aquavall también tienen una apuesta decidida por la movilidad limpia y la reducción de emisiones, ¿qué medidas se están tomando en este sentido?

Mueven todas nuestras acciones, pero pondré dos ejemplos. Estamos renovando el parque móvil con la adquisición de un total de 24 nuevos vehículos 100 por cien eléctricos, con una inversión de 790.000 euros (IVA excluido). Actualmente, la entidad pública ya dispone de cargadores específicos para coches eléctricos en sus instalaciones de la ETAP (Estación Potabilizadora de Agua Potable) de Las Eras y tiene previsto instalar nuevos puntos de recarga en la potabilizadora de San Isidro y en la depuradora del Camino Viejo de Simancas.

También en la ETAP de las Eras se procederá a la reparación de cubiertas y fachadas en edificio de filtros, donde se realizará una instalación de energía fotovoltaica. Esta obra requiere de una inversión de 615.630 euros (sin IVA), y permitirá a Aquavall avanzar en sus objetivos de sostenibilidad y eficiencia energética.

Esta nueva planta fotovoltaica generará ahorros superiores a los 23.500 euros anuales en la factura eléctrica y dejará de emitir 99 toneladas de CO2, lo que equivale al consumo de CO2 de casi 200 árboles adultos.

Una de sus prioridades es concienciar a la ciudadanía sobre la importancia de la consecución de los objetivos de desarrollo sostenible, ¿realmente estamos concienciados o queda mucho trabajo por hacer?

Los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) son el mayor proyecto común de la humanidad. Los 17 Objetivos y sus 169 metas son fruto de un exhaustivo análisis de diagnóstico de la sociedad global llevado a cabo por las mayores Instituciones a nivel mundial y encabezado por Naciones Unidas. Los Objetivos persiguen la igualdad entre las personas, salvaguardar el planeta y asegurar la prosperidad como parte de una nueva agenda de desarrollo sostenible. Un nuevo contrato social global que no deje a nadie atrás. Aquavall, consciente de la importancia de los ODS, está comprometida y alineada con la agenda 2030.

Además, desde la Concejalía de Medio Ambiente, estamos desarrollando el documento para la ciudad y estamos en periodo de redacción de reparación de las cubiertas de las naves de desbaste, cogeneración, turbosoplantes y edificio de control, e instalación de placas solares en la Depuradora de Residuales, una apuesta más de Aquavall por el medio ambiente, nuestro consumo eléctrico es 100 por cien verde.

¿En qué momento está el proyecto de crear una zona de bajas emisiones en Valladolid?

La contaminación atmosférica es uno de los principales problemas medioambientales asociados a las aglomeraciones urbanas a los que es necesario hacer frente debido a su incidencia directa en las personas y en el medio ambiente. Las afecciones que causa esta contaminación están asociadas, principalmente, a los sistemas respiratorio y cardiovascular. Los grupos de población más afectados son las personas de avanzada edad, las mujeres embarazadas, los niños y las personas con enfermedades respiratorias o cardiovasculares crónicas; por lo que es necesario que la calidad del aire se incorpore en las agendas políticas de las corporaciones locales, para que en el ámbito de sus competencias tomen las medidas oportunas para mantener y si cabe mejorar la calidad del aire de la ciudadanía. Por eso, ahora mismo está en redacción el Plan de Calidad del Aire que contendrá entre otras acciones un proyecto de ZBE, como contempla la Ley de Cambio Climático para ciudades mayores de 50.000 habitantes y que se encuentra en tramitación.

EDUCACIÓN

La concejala de Medio Ambiente y Sostenibilidad del Ayuntamiento de Valladolid, María Sánchez, explica cómo desde Aquavall se entiende la educación como un derecho y base fundamentales para hacer realidad un desarrollo sostenible. «La cultura de la responsabilidad medioambiental y de la consecución de los objetivos del desarrollo sostenible debe iniciarse desde la educación».

Aquavall ha desarrollado un programa educativo para estudiantes de primaria. Vasito y Macetilla son los protagonistas que guiarán a los niños de Valladolid en la divertida #aventuradelagua a través de talleres experimentales en las aulas, en cómics con sus divertidas historias, y de una divertida y participativa web: www.vasitoymacetilla.es. Los profesores también pueden encontrar ahí el programa y recursos.

Programa medioambiental Huertos Escolares tiene como objeto el conocer por medio de la educación ambiental conceptos como la soberanía alimentaria, el cultivo de alimentos básicos y la concienciación sobre hábitos de alimentación más saludables y sostenibles, con una llamada a un consumo de proximidad y ecológico, generando, a través del huerto, un espacio curricular para todo el centro y un lugar de encuentro de toda la comunidad educativa.

La Sala del Agua del Museo de la Ciencia y la Casa del Río son un marco incomparable para educar en el cuidado del agua y del medio ambiente. Aquavall colabora en su mantenimiento y ofrece actividades gratuitas el Día Mundial del Agua y el Día Mundial del Medio Ambiente.

Conocer el agua hace que lo valoremos más, por eso se han abierto las puertas de las instalaciones en ‘un aula viva del agua’ que es la Depuradora de Aguas Residuales y la Estación Potabilizadora de Las Eras.