La Junta asume un coste adicional de 14M€ en el transporte

SPC
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El Gobierno autonómico amplía la cobertura y asume las aportaciones de ayuntamientos y diputaciones, a la vez que congela el precio de los billetes

Vehículo que realiza el transporte a la demanda por la Ribera del Duero vallisoletana. - Foto: Jose Carlos Castillo

La Junta deberá aportar cada año 14,6 millones más para poner en marcha en 2023 el nuevo modelo de transporte de viajeros, que recibirá 78,42 millones de las arcas autonómicas. Con estos fondos, se pretende mejorar el servicio y llegar a todas las poblaciones (6.284), frente a las 5.115 actuales.

De acuerdo a la documentación consultada por Ical y que acompaña al proyecto de decreto del mapa de ordenación del transporte de viajeros, la propuesta de la Junta exigirá más financiación para prestar el servicio concesional, a los que se unirán otros 3,5 millones para articular el sistema tecnológico de gestión del servicio, así como 1,6 millones anuales para sufragar el coste de mantenimiento. 

Esto es debido a que contempla la generalización del transporte a la demanda, que se incrementará en un 78 por ciento, pues todas las rutas cuya demanda sea inferior a 4.500 viajeros al año pasarán a ser prestadas con esta modalidad, y se ampliarán hasta alcanzar todos los núcleos poblacionales. Además, se extenderá la integración de los servicios regulares y escolares a la totalidad de itinerarios -1.772 rutas-.

De esta forma, la Consejería de Fomento y Medio Ambiente sigue dando pasos hacia el nuevo modelo de transportes que estará en vigor en dos años. El primero es la presentación del proyecto de decreto, que permanecerá en exposición pública en el portal de Gobierno Abierto hasta el 14 de abril, para su aprobación a principios de verano. 

De esta forma, Fomento desvela los detalles de un nuevo modelo concensional que tendrá un coste anual de 107,92 millones, que engloba los 101,76 millones de prestar el servicio regular, a la demanda e integrado (general y escolar), a los que se unen 6,16 millones del equipamiento y mantenimiento para la gestión y reserva de billetes. Esto supone un incremento respecto al actual, que llega a los 98,3 millones.

Para financiar el futuro sistema, Fomento prevé ingresar 29,5 millones anuales con la venta de billetes, solo 500.000 euros más que ahora, a pesar de que los viajeros crecerán, sobre todo con el transporte a la demanda, que se duplicarán hasta alcanzar el millón. Esto es debido a que no se contempla una subida de tarifas, a lo que se une el bono rural, que hará gratuito el servicio. 

Por lo tanto, el aumento del coste se sufragará mediante las aportaciones de la Junta que crecerán notablemente y que acabafrán con la financiación de competencias impropias por parte de las entidades locales, ya que se hará cargo de los dos millones que aportan ahora.

Un proceso avanzado hasta marzo de 2023

Fomento tiene muy avanzado el despliegue del nuevo modelo de transporte, para que se vayan dando pasos sin interrupciones. De esta forma, se iniciará en octubre la publicación de los anteproyectos de explotación, que se asemejarían a los pliegos de prescripciones técnicas de las concesiones y en los que se determinarán los horarios, las frecuencias y vehículos.

La Consejería quiere analizarlos con ayuntamientos, diputaciones, empresas del transporte, pero también con patronal y sindicatos para un acuerdo de subrogación de los trabajadores que pasen de una compañía a otra.

El objetivo es adjudicar en otoño de 2022 las concesiones, lo que concluirá con el inicio de los nuevos servicios en marzo de 2023.