La crisis sanitaria provocada por la covid-19 ha obligado a Sacyl a acelerar la implantación de las consultas de alta resolución, aquellas en las que el paciente en una única visita es explorado, recibe los resultados de las pruebas, el diagnóstico, el alta médica y la orientación terapéutica. El proyecto de gestión, que se vio paralizado por la pandemia, recibe ahora un impulso para cerrar el año con la implementación del modelo en todas las áreas y, también, con el doble objetivo de reducir las visitas del paciente al hospital y avanzar en la equidad y la calidad del sistema.

El modelo, en el que ya se venía trabajando, ha recibido en esta legislatura un nuevo impulso, hasta el punto de que en torno a un 20 por ciento de los pacientes son atendidos ya en este tipo de consultas. De hecho, figura entre los compromisos del pacto de Gobierno PP-Cs, donde se establece como método ordinario para todos los pacientes que residan a más de 50 kilómetros de su hospital de referencia, algo que afecta, principalmente, a las provincias de Soria, Palencia y Burgos y, en menor grado, a la de Valladolid.

En estos momentos, cada centro y cada especialidad avanza en su estrategia de alta resolución, ya que hay servicios donde se pueden potenciar mucho, como ocurre con los de Cardiología, Oftalmología o Dermatología, mientras que en otros, como Digestivo, es más complicado, explican a Ical fuentes de la Consejería de Sanidad. De hecho, todos los centros han recibido las indicaciones para trabajar en este proyecto que figura en los planes de gestión anual de Sacyl, con el fin de definir los procesos que son susceptibles de alta resolución e implantar las consultas.

«Existe ya un porcentaje bastante respetable de alta resolución, pero queremos potenciarlo porque la situación covid-19 obliga a intentar que los pacientes vengan al hospital el menor número de veces posible», y porque es necesario «seguir trabajando en la equidad y la calidad del sistema», precisan desde la Consejería. Añaden, que la idea inicial era que este verano el modelo estuviera funcionando, pero se vio paralizado porque «se ha estado a lo urgente, a atender a los pacientes con la covid-19». Ahora «se trabaja para darle un empujón, con el objetivo también de mejorar la lista de espera», trastocada por la pandemia.

Especialidades. En el conjunto del sistema existe mucha variabilidad entre especialidades y áreas debido a las características de cada patología. Así, en el área médica el porcentaje se sitúa en el 18,32 por ciento, mientras que en la quirúrgica se eleva al 21,45 por ciento, y en las consultas externas al 20,17. El área pediátrica ya realiza el 26,34 por ciento de sus consultas por alta resolución, y la obstétrica, el 17,10.

En cuanto a las especialidades, la mayor proporción de consultas de alta resolución implantadas en primera consulta son Hematología (58,29), Cardiología (29,95), Dermatología (28,73), Alergias (24,65) y Neumología (23,61), mientras que en la quirúrgicas hay mayor proporción en Anestesia (44,33), Otorrinolaringología (38,25), Ginecología (24,31) y Oftalmología (19,34).