Mike Tyson anunció hace ya varias fechas su vuelta al cuadrilátero para una serie de combates benéficos. Si bien en ese momento la expectación ya era alta, el veterano púgil estadounidense de 53 años ha provocado un incendio en las redes al publicar varios vídeos en los que muestras su buen estado de forma, una brutal pegada y un baile de pies digno un deportista en activo.
Su nuevo entrenador, el brasileño Rafael Cordeiro, llegó a manifestar que el primer día que hizo manoplas con el excampeón de los pesos pesados pensó que de un golpe le tiraría al suelo.
Cordeiro manifestó que en su método de entrenamiento acostumbra a colocar los guantes cerca de su rostro para invitar a su pupilo a golpear como si estuviera en el ring y aseguró que al ver pasar su derecha sintió como su vida pasaba por delante, que iba a morir.
La 'vendetta' del mordiso
El estadounidense Evander Holyfield, excampeón del mundo de los pesos pesados, saldrá temporalmente de su retiro para afrontar varias peleas de carácter benéfico, según un anuncio hecho por él mismo en su cuenta de Twitter que inmediatamente fue respondido de forma multitudinaria por seguidores que le piden un combate contra Mike Tyson.
Holyfield, de 57 años y retirado desde 2011, no adelantó quién podría ser su rival.
Tras aquello, Tyson recibió una oferta de un millón de dólares para pelear un combate benéfico en Australia.
Ambos púgiles protagonizaron la pelea estelar de la velada llamada The Sound and the Fury (El Sonido y la Furia), que después se conoció como The Bite of '97 (La Mordida del '97), que se celebró en el MGM Grand Garden Arena, de Las Vegas (Nevada).
El combate, el 28 de junio de 1997 con el titulo del campeonato de peso pesado de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB) en juego, logró notoriedad después de que Tyson le arrancase de un bocado parte de la oreja derecha a Holyfield.
Tyson fue descalificado y perdió su licencia de boxeo en el estado de Nevada, aunque luego la recuperó y pudo volver a boxear.