Nuevos retos para Tierra de Sabor que cumple una década

P.V.
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La marca se enfrenta a un análisis exhaustivo de sus ventajas y debilidades para poder competir en un mercado globalizado

Una de las ferias en las que ha participado la marca Tierra de Sabor estos años. - Foto: Ical

Diez años después de su nacimiento, la marca del gran corazón amarillo se ha consolidado, no solo en tierras castellanas y leonesas, sino que salta fronteras y ya cuenta con tienda propia en algunos países como Irlanda. Un largo camino de promoción, numerosos eventos, cambios de estrategias o diversificación de la marca que ha ido sumando empresas, a la vez que algunas se quedaban fuera.

Tras una década desde su presentación oficial en sociedad el 18 de marzo de 2009, la marca de calidad con la que se distinguen 907 empresas de Castilla y León y 5.950 productos en la actualidad se enfrenta a un análisis exhaustivo de sus ventajas y debilidades para afrontar las necesidades actuales de un mercado globalizado y competitivo sin olvidarse de seguir dando confianza al consumidor y conservar la calidad arraigada a la tierra que siempre ha sido uno de sus puntos fuerte.

La primera vez que se dio a conocer en público el corazón amarillo que ha acompañado a la marca durante todos estos años, incluso se ha variado con la segmentación de la misma, fue en Alimentaria Castilla y León presentándose ante industriales y profesionales de la distribución. Unos días después, el 27 de marzo de 2019, la empresa Olifrey de Zamora solicitó la adhesión a Tierra de Sabor con sus bombones Caprichos, los primeros en lucir el logotipo.Pero sin duda, uno de los actos más recordados en la Comunidad fue la presencia en tierras castellanas y leonesas del actor norteamericano Gary Dourdan, de la serie CSI Las Vegas, que protagonizó la campaña de publicidad nacional que acompañó el lanzamiento de la marca.

Un apadrinamiento que dio paso a diez años de trabajo para consolidar una marca que ha entrado en muchos hogares de toda España y que también dio el salto internacional con su presencia en numerosos países, entre ellos Estados Unidos.

Ahora Tierra de Sabor se prepara para un mercado globalizado pero manteniendo sus referentes. «La marca tiene que ir en paralelo al mercado y con el denominador común de la calidad», señaló el viceconsejero de Desarrollo Rural y director general del Instituto Tecnológico Agrario, Jorge Llorente, que destacó sus puntos fuerte como que se trata de productos vinculados a la Comunidad y con valores añadidos como que están producidos de forma sostenible, donde se va incorporando la tradición y la innovación, «porque lo más importante en el futuro de la marca es que el consumidor y los operadores que trabajan con ella sigan teniendo esa máxima de que es un producto de calidad y de la tierra».

Desde la nueva Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural confirmaron que se apuesta por el crecimiento de esta marca por lo que en la actualidad se trabaja en un análisis general de la misma para conocer las tendencias actuales del mercado y ver hacia dónde tiene que ir, aunque no se marcan una fecha para conocer los resultados. «Tenemos cuatro años por delante para seguir conservando la calidad como estandarte de la marca y afianzando la confianza del consumidor», aclaró Llorente, que añadió que lo importante son conocer cuáles son los objetivos.

Dentro de ese periodo de reflexión «más profundo» están escuchando las demandas de los operadores que exigen productos con sabor, con características organolépticas, que sean nutricionales y que se elaboren con métodos sostenibles ligados a la tierra.

«Lo fundamental es que las actuaciones estén dirigidas al público que crea opinión, en nuestro caso en un sector tan importante como el gastronómico, que es un gran aliado», recalcó el viceconsejero, que puntualizó que en este caso se está posicionando mucho la marca con numerosas actuaciones para que destaquen tanto las empresas más familiares como las más grandes y otro tipo de industrias de la región.

«Hay un abanico de clientes que avalan todo tipo de mercados porque ha habido una buena actuación de promoción a la hora de hablar de nuestros productos», señaló. Además, incidió en que para llegar a ese posicionamiento también se ha trabajado en la protección sostenible y la seguridad alimentaria y sanitaria.

Internacionalización

La internacionalización es uno de los objetivos para que la marca continúe creciendo y generando riqueza y empleo para el medio rural. Durante estos años se ha abierto la primera tienda en Irlanda y se han hecho prospecciones en Estados Unidos y México, a lo que se suman acuerdos comerciales que han permitido posicionar referencias de Castilla y León en algunos de los mejores restaurantes de Nueva York y Los Ángeles, tanto de vinos como de otros productos como el cochinillo de Segovia o los quesos.

Desde la Consejería de Agricultura destacaron que el objetivo es seguir trabajando en esa línea con la presencia en ferias internacionales con Tierra de Sabor Heart of Spain de la mano del Instituto de Competitividad Empresarial (ICE), así como abordar nuevos mercados.

Respecto a la expansión a más países, Llorente aclaró que depende en buena medida de cada tipo de producto, «por ejemplo, en el caso de los ibéricos, el abanico llega a los cien». «Poco a poco la experiencia nos va dando nuevos mercados y en las reuniones que tenemos con el sector se busca qué mercados interesa en cada momento», añadió.

La bandera gastronómica de Tierra de Sabor ha logrado en estos años ser una marca consolidada y conocida, ahora el reto radica en que se transforme en una marca querida, que aporte un valor añadido a las empresas y productos.