Ollero: «Superar lo hecho por Pisonero es difícil»

M.B
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Creció en el San Viator, fue entrenado por Juan Carlos Pastor y pasó por el BM Lourdes antes de irse a Soria. Se hizo técnico allí y en junio de 2017 llegó a los gladiadores azules. Fue segundo de Nacho y de Pisonero, y ahora se estrena como primero

Ollero: «Superar lo hecho por Pisonero es difícil» - Foto: Alejandro Nieto Alonso

La semana comenzó con sorpresa en el seno del Recoletas Atlético Valladolid. El club anunciaba el adiós de David Pisonero, su hasta entonces entrenador al hacerse cargo del Vardar macedonio, vigente campeón de la Champions. La entidad que preside Mario Arranz reaccionó rápida, hizo un cambio natural, ‘ascendiendo’ a su segundo, Óscar Ollero, a primero, e incorporando en el staff técnico a Óscar Perales, llegado hace un mes al club para dirigir la base. Ollero-Perales será el nuevo tándem de los gladiadores azules. El primero tiene claro qué es lo que busca y qué es lo que quiere, pero sin volverse loco. 

¿Ya ha digerido los cambios y lo que le viene la próxima temporada como primero en la Asobal?

Ahora, cuando voy viendo las cosas en frío, me estoy dando cuenta de que el paso es grande. Al principio me parecía pequeño, pero cada vez te vas dando cuenta de que hay muchas más cosas. Pero me voy encontrando bien. Lo primero que he hecho es hablar con los jugadores, que están a muerte con ambos. Entienden lo que ha pasado perfectamente, todos harían lo mismo que ha hecho David (Pisonero). Ellos me van a ayudar. Con su apoyo, porque esto es una gran familia, intentaremos hacer lo mismo. Además de la involucración de Perales. Con su personalidad y su forma de ver el balonmano, a ver si formamos el mismo tándem que David y yo.

¿Se lo llegó a plantear? Lo de llegar a primero de la Asobal.

No me lo planteaba. Es como lo de David, es lo mismo. Pero siempre tienes las expectativas de seguir creciendo, esto es un aprendizaje continuo. El que diga que no, miente. Aprendes de todo el mundo, jugadores, del delegado, de todos... tienes que ser como una esponja, coger de todos los lados.

Habló en su presentación de un proyecto continuista pero seguro que habrá alguna cosa...

Al final todos tenemos un toque diferente. El entrenador que entra siempre da un pequeño matiz. Es verdad que yo puedo ser más impulsivo, incluso visceral, aunque no sé si esa es la mejor palabra. Soy de sangre caliente, quizá más que David, pero creo que no es malo, lo vivo más de cerca.

¿Habrá muchos cambios en el juego?

El sistema fue una cosa que amoldamos entre los dos. Teníamos claro la forma de trabajar y los cambios en el sistema de juego. En eso se van a cambiar muy pocas cosas. Hay que seguir como lo estábamos haciendo. El sistema de juego tiene que ser muy similar porque funciona. Y nos dimos cuenta todos, jugadores y entrenadores.

Pastor, Raúl González, Pisonero, Cadenas... muchos entrenadores españoles y de la escuela de Valladolid. ¿De quién ha cogido más cosas?

Prefiero coger una cosa de cada uno. Todos tienen cosas buenas, hay que coger lo mejor de cada uno. Pastor fue un adelantado a su época, en ver el balonmano de forma diferente. Valladolid se ha aprovechado de eso. Consiguió triunfar con un estilo diferente a lo que había en la Asobal y también con España. Raúl ha hecho algo parecido, tiene cosas del trato, como David, con los jugadores... De Cadenas mil, la técnica individual, el hacer que los jugadores crezcan. Podría decir de todos. Hay que intentar luego crear tu propio estilo de juego. Y también depende de los jugadores que tengas.

¿Plantilla cerrada?

La plantilla está completamente cerrada. Estaba ya planificada con David. Todo cerrado. Estoy encantando con la plantilla que tenemos y los cambios son... aunque fastidia decirlo así, igual incluso mejoramos un poco. Hemos intentado traer a gente que te puedan cuadrar en nuestro estilo.

Y el reto que le llega... tras la mejor temporada del club en la Asobal...

Mi amigo (David) se va de aquí y me deja un listón a la altura de récord del mundo, por puntos, clasificación... Superar eso me parece muy difícil, aunque el reto es seguir dando pequeños pasos adelante. Ese es mi reto, seguir creciendo como club y como plantilla. Habrá momentos difíciles pero se superarán. Las notas llegarán en mayo.

También cuenta con la confianza del club, que le firma dos años.

Nunca se sabe. Yo siempre he firmado de uno en uno, por lo que pueda pasar. Al final quisieron dos y no le doy más vueltas.

Y a Óscar Perales, ¿qué le pedirá?

Le conozco de toda la vida. Cuando elijo a Óscar, que es en la primera persona en la que pienso, es porque es parecido a lo que soy yo. Me va a dar muchísimo, además de otros dos ojos para ver el balonmano. Un tío que ha entrenado en Plata, conoce jugadores, tiene todo... Podría ser el primer entrenador y yo el ayudante.