Valladolid volverá a ser la gran referencia del pádel mundial esta semana. De hecho lo será desde este sábado y hasta el próximo domingo, 23 de junio, con la disputa de la séptima prueba del año del World Padel Tour, en este ocasión bajo el paraguas de Máster, con más dotación económica y más parejas en liza.
Tras visitar Marbella, Logroño, Alicante, Vigo, Jáen y Buenos Aires, toca el turno de la capital castellana, que acoge el mejor pádel del mundo desde 2006, cuando el Club de Campo La Galera albergó los Internacionales de Castilla y León, dentro de la primera edición del Pádel Pro Tour.
En esta ocasión, la categoría Máster, como máximo escalafón de torneos del circuito profesional, no solo para este 2019 sino para, al menos, las próximas cuatro ediciones.
La competición arranca este sábado en el Club Raqueta, con entrada libre. Es decir, un día antes de lo normal y con tres jornadas más (sábado mañana y tarde;y domingo mañana). El martes será el momento de la Plaza Mayor, también una jornada antes de lo que era habitual en los Open. Otra de las novedades de este año es la instalación de una pista externa en la calle Acera de Recoletos -donde ya se celebró una Copa de Castilla y León hace más de un lustro- que albergará partidos, masculinos y femeninos, desde el lunes.
«El retorno económico estimado que generará el torneo en Valladolid es de casi dos millones de euros frente a los 1,6 millones aportados en la anterior edición, lo que supone un incremento del 25%. Se prevé, asimismo, que la condición de Máster repercuta en un incremento del interés mediático a nivel mundial estimado en un 30%. El paso de Open a Máster es, también, un aliciente para los jugadores: los palistas optarán a conseguir un 45% más de puntos y un 35% más de dotación económica de los premios», se señalaba desde el Ayuntamiento a finales del año pasado, cuando se hizo público el paso de Open a Master.
Lo que no cambia es la principal ubicación, la de la Plaza Mayor, donde se jugarán las rondas finales de ambas categorías, finales incluidas.
En Valladolid estarán 156 parejas (100 en categoría masculina y 56 en la femenina), con Maxi Sánchez y Sanyo Gutiérrez, como números 1 del ranking masculino y ganadores este año en Marbella, Logroño y Vigo; y Marta Marrero y Marta Ortega, como números 1 del femenino y también con tres victorias este año.
Aunque los ojos de los espectadores estarán puestos en los de casa, en el donostiarra Amondarain y el vallisoletano Ivan Arrondo, números 95; en el canario Claudio Conrado y el argentino Sebastián Iranzo-Díaz, residente aquí, números 88; en los pucelanos Alfonso Sánchez y Pelayo Villaverde; los 84; en el vallisoletano Arturo Coello y el argentino Juan Manuel Vázquez; los 36; en el pucelano Javier Martínez y el gallego Adrián Blanco, 25... más Diego Ramos-Juan Manuel Restivo, residentes en Valladolid, los 17; Cristian Germán Gutiérrez-Agustín Gutiérrez, que entrenan con Gustavo Pratto; Willy Lahoz, que da nombre a las pistas de La Vega, como 28; el gaditano Rafa Méndez, que entrena en Valladolid, número 16 en este torneo con Ignacio González; además de la vallisoletana Lucía Rodríguez y la segoviana Jimena Velasco, número 55 y campeonas de España infantiles; Marina Pinacho y la belga Helena Wyckaert, la 33; Melania Merino-Esther Carnicero, la 28; y Alicia Blanco-Beatriz Caldera, la 16.
Como árbitro no hay que olvidar que también habrá representación vallisoletana, por medio de Rubén Monzón.
Sin Belasteguín
Una de las principales ausencias en Valladolid será la del jugador argentino Fernando Belasteguín, lesionado en la final del Buenos Aires Padel Master. El que ha sido el mejor jugador del mundo no podrá jugar en la Plaza Mayor por una lesión a nivel de la unión miotendinosa entre el sóleo y su porción tendinosa central sumado a una afectación de la aponeurosis medial del mismo. Además se da la circunstancia de que Valladolid iba a ser uno de los últimos torneos del argentino como pareja del brasileño Pablo Lima. Ambos han anunciado que la próxima temporada separarán sus caminos y este torneo era uno de los últimos en los que iban a jugar juntos.