Y fue así en primer lugar porque la plaza del Paseo de Zorrilla no registró la entrada que se esperaba, también porque en líneas generales el juego y presentación de los toros lidiados no estuvo a la altura del prestigio de esas ganaderías, solo fueron aplaudidos los lidiados en 4º lugar perteneciente al hierro de Jandilla y el segundo de la tarde de la ganadería de Juán Pedro Domecq ambos lidiados por el debutante Pablo Aguado.Los otros cuatro fueron pitados unos con más fuerza que otros. Vamos que no estuvieron a la altura de las circunstancias y porque el diestro Morante de la Puebla no tuvo esa tarde que tantos miles de aficionados esperan de este torero.

De nuevo sonó el himno nacional antes de deshacerse el paseíllo y de que saltase al ruedo el primero de la tarde del hierro de Juan Pedro que de salida fue pitado por su escasez de fuerzas y ante el que Morante nada pudo hacer con el capote. Parecía imposible pero hubo algún momento que el de la Puebla quiso agradar con sus formas. Suena la música y la manda callar. Mató mal de siete pinchazos y un metisaca escuchando un aviso. Más de lo mismo en su segundo del hierro de Jandilla al que saludó con verónicas interminables. El viento y la poca fuerza del toro se llevaron por delante lo que se esperaba. En su tercero del hierro de Domingo Hernández nada de nada. Quiso en algún momento pero pronto desistió escuchando fuertes pitos y gritos de fuera fuera. Mató de dos pinchazos, entera y descabello. Valladolid se quedó sin ver al Morante deseado.

Había expectación y grande por ver al debutante Pablo Aguado uno de los toreros revelación de esta temporada .Para él fueron los primeros rotundos olés al recibir por verónicas al primero de su lote lo mismo que en el quite. Brinda al público y busca con fuerza y clase la entrega de la plaza que poco a poco fue consiguiendo. Al tercer derechazo los olés fueron muy sinceros y redondos. Al natural también lo bordó. Una faena justa en tiempo y con clase. Saludó desde el tercio al que mató de pinchazo y más de media.

Primera corrida de toros - Foto: Ana Vallejo

La única oreja de la tarde la cortó Aguado en el cuarto de la tarde del hierro de Jandilla. Con el capote no pudo lucir. Un buen puyazo previo a dos grandes pares de banderillas de Iván García aplaudidos con fuerza. La faena brillo toreando por naturales bien colocado con mando , buen gusto y rematada con recordados adornos. Estocada entera, aviso y oreja importante y merecida. Más de lo mismo en el último de la tarde del hierro de Domingo Hernández en el que se volvió a lucir por verónicas y sufriendo una espectacular voltereta cuando lo llevaba al caballo. Faena brindada al torero Fortes profunda con la verdad por delante. Suena la música y la manda parar. La espada le quitó los trofeos que la faena había merecido.

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La feria sigue y esperamos mejores tardes y más redondas a partir del jueves de feria.