Munia Panteras no pudo imponerse a Rubí en el segundo encuentro de su eliminatoria de semifinales por el título. Las vallisoletanas, tras perder el pasado fin de semana en Canterac por 2-3, necesitaban ganar este sábado y mañana domingo a las catalanas en su feudo para clasificarse para la final de la Liga. No lo hicieron en un primer partido en el que fueron de menos a más, llegando al descanso 5-0 abajo, poniéndose con un 5-4 con diez minutos por jugarse, pero cayendo definitivamente por 8-4.

El duelo no pudo comenzar peor para los intereses de Munia Panteras. Rubí, mucho más acostumbrado a su pista, salió presionante arriba, buscando los errores de las vallisoletanas. Un lanzamiento lejano de la local María Ayala, ligeramente rozado por una defensa, acabó colándose en la portería de María Sierra para hacer el 1-0 en el minuto 3. El gol fue un mazazo para las Panteras, que solo un minuto más tarde, en una pérdida del disco atrás, recibieron el segundo por medio de Náyade Rodríguez. A pesar de ese inicio, el cuadro pucelano reaccionó y trató de recortar con varias buenas ocasiones, pero sin suerte cara a gol. Lo contrario que su rival, que en una nueva salida desde atrás, vio cómo Andrea Sehuk aprovechaba el rechazo de la portera de Munia Panteras para lograr el 3-0. Era el minuto 10 y Andrés Portero no tuvo más remedio que pedir tiempo muerto para buscar algún cambio. El problema es que los colegiados decidieron que la primera superioridad fuese para las catalanas. Las Panteras defendieron bien hasta tener una ocasión de Verónica Ibáñez, que estuvo cerca del 3-1, pero Judit Pareja en la contra lograba el 4-0 de un potente lanzamiento, con María Sierra tapada. El partido y la eliminatoria se ponía complicada. Aún así, el conjunto pucelano lo siguió intentando, con un poste de Jimena Díez o varios lanzamientos de Shauny Ortega y de Sonia Abón. No era el día del acierto de cara a gol. Todo lo contrario que en el bando contrario que, a 40 segundos del final, hizo el quinto por medio de Judit Pareja, de nuevo en una contra llegando completamente sola.

Munia Panteras lo tenía muy cuesta arriba. Aun así sus jugadoras no bajaron los brazos e intentaron hacer un gol pronto buscando la gran remontada. Aunque sus intentos se toparon con la portera local, el empuje tuvo su premio con un tanto de Paula Prado, regateando a la portera catalana. Eso dio alas a sus compañeras, mostrando la garra de siempre, haciendo tres goles muy similares en un abrir y cerrar de ojos, obra de Olivia Monjas, Mar de Saja y Shauny Ortega. Hasta el punto de obligar a un tiempo muerto entre medias de Rubí y de rozar el empate. Pero en estos partidos cualquier decisión arbitral puede cambiar el signo del mismo. El CPLV estaba con viento de cara y con una superioridad, no acertó y los colegiados decidieron expulsar en una decisión controvertida a una jugadora vallisoletana. Del posible 5-5 se pasaba al 6-4 con un lanzamiento que daba en la espalda de Andrea Sehuk, que estaba delante de María Sierra. En el otro área, en la siguiente jugada, se anulaba el 6-5 en un lanzamiento de Shauny Ortega por área (estar delante de la portera). Las dos decisiones acabaron de minar la moral de las pucelanas, que encajaron el 7-4 por medio de Alejandra Vallejo, tras un rechace, y el 8-4 cuando estaban ya con portera-jugadora, a 9 segundos del final.