El Clínico 'humaniza' la estancia de los pacientes covid

A. G. Mozo
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Crea la figura del 'gestor de apoyo' e implementa una batería de medidas para hacer «más amable y cálida» la estancia de los pacientes ingresados en sus áreas covid, donde las visitas están prohibidas y pasan las 24 horas solos

Una enfermera, accediendo a una de las plantas covid del Hospital Clínico. - Foto: HUMANIZACIÓN HCUV

Carlos llevaba unos días con mal cuerpo, pero no quería ir al médico, convencido de que eso se le pasaría solo. La fiebre y la disnea le obligan a ir a Urgencias, y la neumonía le envía directo a una de las habitaciones covid del Clínico. Carlos se planta allí con lo puesto, ni siquiera tiene el cargador del móvil, con lo que ni hablar de zapatillas, libros o bolsa de aseo. Descolocado y asustado, no acaba de asumir que está ingresado porque tiene coronavirus, pero la entrega del austero pijama de Sacyl y el inconfundible olor a comida de hospital terminan por convencer a este paciente, tan imaginario como real, de lo que tiene por delante.

La sensación de soledad vendrá después, cuando acumule días sin ver a nadie más que a su compañero de habitación y a esos sanitarios de los que se aprenderá hasta los turnos de trabajo. Las plantas covid están cerradas a cal y canto, las visitas son un lujo de otro tiempo. Y tiempo para pensar es lo que le sobra a este Carlos imaginario.

«24 horas solo en una habitación de hospital pueden ser muy largas», reconoce Ana Belén Martín Santos, enfermera de la REA y presidenta de la Comisión de Humanización del Clínico, un equipo de trabajo que ha impulsado todo un plan, llamado ‘Persona. No estás solo’, para tratar de hacer «más amable y cálida» la estancia de estos pacientes.

Ana Belén Martín, recogiendo el premio Teva.Ana Belén Martín, recogiendo el premio Teva. - Foto: HUMANIZACIÓN HCUVEl Plan de Humanización del Hospital Clínico Universitario de Valladolid (HCUV) llevaba cuatro años en marcha cuando irrumpió una pandemia devastadora y que lo cambia absolutamente todo, porque «obliga a que los pacientes estén solos en su hospitalización», por lo que se vio necesario impulsar «una serie de medidas con las que tratar de paliar el aislamiento de esos pacientes». La pandemia aún estaba en la primera ola, pero el equipo de Martín Santos tuvo claro desde el principio cuál debía ser el tratamiento para intentar combatir la soledad del coronavirus.

HUMANIZACIÓN

Fue entonces cuando se pone en marcha el denominado ‘Plan de Humanización del Hospital Clínico Pandemia covid-19’, redefinido ahora como el proyecto ‘Persona. No estás solo’, que ha conseguido el reconocimiento a través de unos premios de humanización sanitaria. 

«Nos pusimos unos objetivos. Queríamos mejorar la información y la comunicación entre personal sanitario y familia, así como entre los propios pacientes y sus familiares; realizar seguimientos al alta; dar apoyo psicológico a los pacientes, los familiares y los profesionales sanitarios; intentar que el paciente estuviese más entretenido durante el ingreso; y, en último caso, ofrecer la opción del acompañamiento de un familiar cuando el enfermo tuviera cercano el fallecimiento, porque es muy duro el no poder despedirse», reconoce Martín.

El cumplimiento de todos esos objetivos exigía implementar una serie de medidas que facilitasen la humanización de la estancia en el Hospital Clínico de los pacientes covid y se fueron adoptando, con mucha imaginación y poco dinero. «La tele, que es de pago, se puso en abierto y también se les facilitaron libros, revistas y pasatiempos, y había vídeos hechos por los fisios que se ponían en las televisiones para que pudieran hacer ejercicio... El objetivo era adaptar la forma de trabajar cotidiana del hospital a la situación generada por el covid e intentar que la estancia pueda ser más amable dentro de lo que se puede, claro», justifica Ana Belén Martín.

«Además, para tratar de mejorar el flujo de información existente entre personal sanitario y familias, hubo ampliaciones en horarios de atención al paciente y admisión, y se puso una enfermera-informadora en el servicio de Urgencias, de apoyo a la TCAE (Técnico en Cuidados Auxiliares de Enfermería) que ya había», apostilla.

'GESTOR DE APOYO'

Pero el gran cambio fue en el ámbito de la hospitalización, con la creación de la figura del ‘gestor de apoyo’ que pueden ser «técnicos superiores, enfermeros, fisioterapeutas...», tal como detalla la presidenta de la Comisión de Humanización del HCUV, y que empezaron a trabajar en turnos de mañana y tarde, los siete días de la semana para poner en contacto a pacientes y familias durante todo el tiempo de ingreso: «Ellos disponen de un teléfono de la familia de ese paciente y son los que llaman ante cualquier tipo de necesidad, desde el cargador del móvil a unas zapatillas, la bolsa de aseo, o la necesidad de hablar con su familia».

Esta enfermera recuerda que «antes del covid, aunque fueran unas horas, siempre había algún familiar con el paciente, pero ahora eso se prohibió y había que dar una respuesta a la situación» y que, en ningún caso, podía ser asumido por el personal que está atendiendo en las plantas covid, debido a «la gran carga asistencial que soportan»: «Todos los días, todos los médicos llaman a las familias para informar de la evolución del paciente, pero la figura del ‘gestor de apoyo’ es otra cosa», explica. 

«Era necesario crear un nexo de unión entre familia y paciente, y eso se consiguió a través del ‘gestor de apoyo’ que, además, dispone de unos teléfonos móviles en todas las plantas covid, con los que poder hacer videollamadas a las familias en el caso de que los móviles de esos pacientes no sean de última generación», defiende Ana Belén. «También se logra que las familias estén más tranquilas, porque es muy duro que una persona pueda estar ingresada 20 días y no poder verla. El que está ingresado, mal, porque él está solo, enfermo, con coronavirus... pero el familiar que está en casa, con incertidumbre, también lo pasa muy mal».

La enfermera de críticos admite que el coronavirus añade un punto de dificultad al estado anímico de los pacientes: «A la enfermedad física, que es muy dura, también se une el enfrentarse a lo desconocido y saben que hay un porcentaje de los ingresados que no se pueden ir a su casa rápido, sino que a los siete días empeoran y tienen que bajar a la UCI». Por ello, en esa función humanizadora también se les presta apoyo psicológico tanto a través de los equipos de la AECC (Asociación Española contra el Cáncer) que están en el hospital, como también a través del servicio de Psiquiatría del propio HCUV, un apoyo que se extiende a familias, pacientes y personal sanitario, ya que «trabajar en estas circunstancias es bastante complejo».

Esta humanización alcanza un nivel más de emoción en el caso de las unidades de críticos, como esa REA «reconvertida ahora en una UCIde Anestesia» en la que trabaja Martín Santos, donde también se encargan de mantener el vínculo con su gente: «Si hay un paciente que despierta, cualquiera tratamos de que pueda hacer una videollamada con su familia para que le vean», destaca la enfermera, quien, pese a todo, asevera que «estos pacientes no tienen las necesidades de uno de planta, porque bastante tienen con lo que tienen, porque están muy graves».

Un trabajo de humanización que Ana Belén Martín considera que va más allá de la pandemia del SARS-CoV-2: «Yo creo que todo el personal del Hospital Clínico está muy volcado y si antes lo hacían, ahora con los pacientes covid, más aún».

UN PREMIO DE TODOS

Un trabajo en equipo que ha recibido uno de los reconocimientos nacionales en el campo de la humanización en el ámbito sanitario, promovidos por la farmacéutica Teva. «Nos han dado uno de los once premios que conceden anualmente para tratar de potenciar todo tipo de políticas de humanización en los hospitales. Lo presentamos bajo el nombre del proyecto ‘Persona. Nos estás solo’, pero en realidad presentamos todo lo que el Plan de Humanización del Hospital Clínico Universitario de Valladolid (HCUV)», explica Martín Santos.

«Este un premio de todos los trabajadores del Hospital Clínico, porque aunque es un programa que está elaborado por la Comisión de Humanización, el que lo pone en práctica es el personal que está en el hospital cada día, desde los médicos, enfermeras, TCAE.. hasta celadores, personal de limpieza..., porque aquí todo el mundo pone su granito de arena para que las hospitalizaciones de los pacientes covid sean más amables», ensalza la presidenta de la Comisión de Humanización del HCUV, quien cree que «más allá de los premios, lo importante es lo que hace cada uno, el trabajo que realiza cada día, cada trabajador en su papel dentro del hospital».