El alcalde de Valladolid, Óscar Puente, ha señalado este martes que el problema del descenso de población que ha sufrido la ciudad según los datos consolidados del año 2020 es el saldo vegetativo, ya que con el "exceso de mortalidad" en dicho año la cifra de fallecidos fue mucho mayor que la de nuevos nacimientos".

Así ha interpretado Puente este martes los datos del padrón, a 1 de enero de 2021, que señalan que la capital vallisoletana perdió 1.490 habitantes a lo largo del año.

El regidor socialista ha recordado que los datos a finales de 2019 fueron "muy buenos" ya que se recuperaron 800 habitantes y suponía un "cambio de tendencia" e incluso la "disposición" a poder recuperar el nivel de los 300.000 habitantes, de la que finalmente al término de 2020 la ciudad se ha alejado y se queda con 297.775.

"No es ya que se vaya gente o no llegue gente de fuera, sino que la sociedad está muy envejecida y ha habido un exceso de mortalidad, muere mucha más gente de la que nace", ha enfatizado. Por ello, esa cantidad de fallecimientos ha conducido en buena parte a perder más de 1.000 habitantes.

A pesar de todo, Puente ha señalado que Valladolid es "uno de los grandes municipios de Castilla y León que menos población pierde porcentualmente hablando". Concretamente es la tercera, por detrás de Aranda de Duero y Soria y también de Arroyo de la Encomienda, único municipio castellanoleonés que ha ganado población, recoge Europa Press.

En cualquier caso, ha recalcado que al Ayuntamiento no le consuela ese dato, porque no quiere perder población sino ganarla y lo que considera que necesita es "actividad económica, buenas políticas de vivienda que asienten población, y para eso necesitamos ayuda de otras administraciones, en este caso de la Junta de Castilla y León".

En este sentido, se ha imaginado que el Gobierno autonómico "mira con horror" que el año pasado se hayan perdido 12.000 habitantes en la comunidad.