Las 'dark kitchen' llegan a Valladolid

M.B
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La pandemia ha hecho que aumenten el número de marcas virtuales y sin locales físicos, con un concepto anglosajón, traducido como cocinas fantasma, que ya tiene su espacio en la ciudad

Cocina de la Dark Kitchen de Fray Luis de León, donde se preparan hasta doce marcas diferentes. - Foto: Jonathan Tajes

«Dark kitchen Valladolid, dígame». Y tras esta simple frase un cliente, al otro lado del teléfono, puede elegir una hamburguesa americana de un restaurante, un taco mexicano de otro, una pizza italiana de otro más... Esa frase, desconocida para muchos, abre el abanico de ofertas a un comensal que, sin moverse de su casa, puede seleccionar su comida favorita para degustar en su domicilio. Aquí no hay local con mesas, no hay camareros ni cartas físicas, no hay una terraza... por no haber no hay en algunos casos ni cocinas diferentes. Son las dark kitchen, un concepto anglosajón que lleva un par de años triunfando en Madrid o Barcelona y que en Valladolid ya ha llegado... para quedarse. 

Cocinas fantasma, cocinas ciegas, cocinas cerradas al público... cada vez son más los emprendedores vallisoletanos que se lanzan a la aventura de las marcas virtuales, de cartas y productos de venta online, sin ese local, bar, restaurante o establecimiento físico, abierto al público. En Valladolid, la mayoría van entrelazadas a grupos de restauración con éxito y que buscan nuevos nichos de mercado. Así, Bella Isabella, Chito, Limón&Lima, Burrito Mex, Poke Hawaii, Tortillas y rotos, Casero y sano, Gourmet Kebab&Dürums y Custom Burger&Dogs, Habanero Taquería, Tony Roma’s, O Mamma Mia, Carl’s Jr... son algunas de esas marcas virtuales creadas o que han llegado a la ciudad en el último año, incluso en las últimas semanas, sin ese local físico donde degustarlas.

La pandemia, con el cierre de la gastronomía, con las restricciones del consumo a las terrazas, con las propias del aforo en interior cuando se pudo y con la implementación del conocido como take away (comida para llevar), ha hecho que aumenten las cocinas habilitadas únicamente para producir comida de envío a domicilio.

El grupo Moga lanzó a finales del año pasado varias marcas virtuales, que preparan en sus cocinas. El grupo Moga lanzó a finales del año pasado varias marcas virtuales, que preparan en sus cocinas. - Foto: Jonathan Tajes«Lanzamos Chito (cocina mexicana para llevar, como burritos, tacos y nachos caseros) el 23 de abril del año pasado. En nuestro caso salió de dos de nuestras cocinas, que en ese momento no estaban explotándose», explica Alberto Pastor, CEO de Brook Group. En su caso, llevaba un par de años pensando cómo hacerlo y ahora ya tiene incluso local físico para dar el siguiente paso: «Seguimos buscando un punto estratégico donde no llegamos ahora y desde allí sacar nuestras marcas Brook Steakburguer y Chito, y una segunda de hamburguesas». De momento están en formato delivery (envío de comida preparada) y tienen una propia APP.

Mesa Cero del Val, conocido local del centro de la ciudad, quiso adaptarse a las restricciones y al cierre temporal de la hostelería creando otra línea de negocio, con su marca virtual Limón&Lima: «Es un concepto más de cocina latina, por ejemplo con arepas, causas... un poco más informal». «Queremos traer el sabor de las calles de México a Valladolid», decía a CyLTV Alejandro San José desde Habanero Taquería, uno de los últimos en abrir bajo este concepto: «Es como si fuera un restaurante sin comedor, solo para take away o delivery».

Otros dos importantes grupos de restauración locales han dado el paso de abrir sus cocinas virtuales en los últimos meses. «Si quieres comida a domicilio de calidad, disponemos de 10 restaurantes en Valladolid», con este mensaje nacía ‘Moga en casa’, un servicio creado para atender la demanda de los consumidores a través de una única web. Así un cliente puede elegir burritos mexicanos, tacos o nachos, pokebowls y pan bao... hasta productos más tradicionales como tortilla de patata y francesa o unos buenos huevos rotos además de otros de comida rápida al uso como son las hamburguesas y kebabs. «El pedido online cada vez está más generalizado gracias a las apps de comida a domicilio por lo que no es algo nuevo», señalan desde el grupo, añadiendo que lo mantendrán en el tiempo, ya que «es una manera perfecta para que el cliente pueda degustar platos de restaurante en la comodidad de su hogar o en la oficina o en cualquier sitio». 

Cocina de Chito, del Grupo Brook, marca que pasará a ser física en breve. Cocina de Chito, del Grupo Brook, marca que pasará a ser física en breve. «Normalmente se abre el local y luego se lanza delivery. Debido a la situación, nosotros hemos decidido primero sacarlo primero para llevar y luego hacerlo físico», explica Rubén Valdivieso, del Grupo Altuntun, sobre el reciente lanzamiento de Bella Isabella, un restaurante cuyo concepto son las pizza gourmet (con productos kilómetro cero). En su caso han adaptado dos cocinas (Lunático y Pícara) para su dark kitchen. «Queremos crear una experiencia en casa, imitando las cajas de los Iphone... creemos que abriendo la caja empieza todo. Además de tratar el producto, todos los pedidos llevan un flyer con un código de Spotify para una lista de reproducción».

El Grupo Beer&Food ha sido el que ido más al concepto de dark kitchen, abriendo a finales de julio del año pasado una especie de coworking de fogones en Fray Luis de León. Hasta doce marcas, de hamburguesas, pizzas, comida mexicana... salen de sus cocinas. «Estábamos buscando una ciudad con esas características. No queríamos empezar en una grande porque queríamos testar el modelo. Si tenemos éxito sería más interesante», reconoce Thierry Rousset, director general de la división de Dark Kitchens y Virtual Brands de Beer&Food, que ha arrancado su proyecto de dark kitchen en Valladolid y en breve abrirán en Salamanca y Logroño: «Estamos muy contentos con la respuesta de Valladolid». Empezaron con tres marcas, Tony Roma’s, Tommy Mel’s y La Chelinda, pero ya van por 12: «Lo bueno de este modelo es que tenemos flexibilidad para activar, desactivar marcas». Así, a ciertas horas en los aledaños de su establecimiento es normal ver a numerosos riders de diferentes plataformas recogiendo los productos para llevar: «La cocina está estructurada por zonas. Parrilla, productos fritos, fríos... y ahora la parte de las pizzas. Muchos de los equipos se comparten».

Son las dark kitchen. Un concepto que ya ha llegado a Valladolid.

Una cocina, múltiples marcas

Porque el concepto de dark kitchen se ha traducido como cocina fantasma o restaurante fantasma. Viene a significar algo así como un restaurante sin comedor, sin local, sin camareros, sin mesas, sin terraza... Su origen es, básicamente británico, y en España lleva un par de años funcionando, sobre todo en Madrid y en Barcelona. Desde una misma cocina o local se pueden preparar un número x de marcas. «Es un restaurante multimarca sin sala. O una cocina multimarca exclusiva para delivery», apunta Thierry Rousset, de Dark Kicthens & Virtual Brands. En su caso, en Valladolid cuentan ahora con 12 marcas que salen desde un mismo establecimiento: «Lo bueno es que podemos cambiar en función de cómo funcionen o del momento de la temporada». Ellos cuentan con siete empleados y una pequeña zona de take away (para recoger directamente en el local): «La idea es concebir las cocinas para que sean dinámicas y flexibles».