Renault ha hecho en los últimos días dos anuncios oficiales de vital importancia para las plantas de Valladolid. El primero es la confirmación, por parte del presidente de la compañía en España, José Vicente de los Mozos, de que la firma francesa abordará un cuarto plan industrial en este país cuando acabe el que está en vigor, en 2020. Una noticia esperada por los sindicatos, pero que puede suponer un futuro de estabilidad si finalmente la Dirección llega a un acuerdo con los sindicatos, tal y como ocurrió en los planes anteriores. Y siempre que los nuevos modelos que contemple ese plan, si es que los contempla, funcionen en el mercado como lo ha hecho el Captur. Desde su lanzamiento en 2013, ya son más de 1,2 millones de unidades del Captur las que se han vendido en todo el mundo. Además es, por volumen, el tercer vehículo más producido y el segundo más exportado de la historia de Renault en España.

Ese será un horizonte que habrá que despejar a partir del año 2021. La segunda noticia desvelada tiene que ver con lo que pasará en ese año y medio. La multinacional francesa desveló este miércoles el aspecto que tendrá el Nuevo Captur, el primer modelo de la compañía en montar una motorización híbrida recargable E-TECH. También será, junto al Clio, pionero en la incorporación de sistemas de conducción autónoma.

El Captur híbrido marca la transición al IV Plan Industrial

La empresa hizo público un comunicado en el que destaca que la nueva versión tiene una línea más moderna y un espacio interior más habitable «gracias a una revolución interior que lo lleva a otra dimensión, tanto desde el punto de vista tecnológico como del cualitativo». La llegada al mercado de Nuevo Captur se realiza en el marco del plan estratégico Drive the Future (2017-2022) del Grupo Renault y forma parte de los compromisos adquiridos con los trabajadores en el III Plan Industrial.

Renault lanza la nueva versión del 'vallisoletano' Captur

El Nuevo Captur pasa a la gama superior también en cuestión de motorizaciones, con una oferta más amplia y renovada, tanto en gasolina como en diésel. Asociadas a una caja de velocidades manual de cinco o seis relaciones o a una caja automática de doble embrague de siete relaciones, estas motorizaciones van de 100 a 155 CV en gasolina y de 95 a 115 CV en diésel.

Independientemente de que el IV Plan Industrial sea un éxito, tal y como prevé el propio De los Mozos, la evolución del mercado marcará el futuro. Una incertidumbre difícil de despejar en un sector sumido en un proceso de cambio constante y que camina hacia movilidad eléctrica, sobre todo a raíz del anuncio del Gobierno de prohibir la venta de vehículos de otro tipo a partir del año 2040.

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Una medida, por cierto, criticada por el propio De los Mozos la pasada semana. «Está muy bien pensar en 2040, pero hay que sacar adelante la cuenta de resultados», señaló. El presidente de Renault España fue un poco más lejos y pidió al Gobierno, en un acto al que acudieron la ministra de Industria, Reyes Maroto, y la de la Transición Ecológica, Teresa Ribera, que proteja «la joya de la corona», en referencia a la automoción, con un pacto de Estado.