Lío diplomático y político a cuenta de la reunión que mantuvo el pasado jueves la titular de Exteriores, Arancha González Laya, con el ministro principal de Gibraltar, Fabian Picardo, en Algeciras. Un encuentro sin precedentes entre un miembro del Gobierno español y el líder de la colonia británica que no sucedía desde hacía 300 años, ya que el Peñón no tiene calidad de Estado.
Las reacciones a esta polémica reunión no se hicieron esperar y los principales partidos de la oposición -PP, Cs y Vox- exigieron ayer la inmediata comparecencia de la ministra en el Congreso para explicar lo sucedido y por qué España se reunió con Picardo, una cita de tacharon de «error histórico».
El Partido Popular acusó al Ejecutivo de Pedro Sánchez de «traspasar una línea roja» y dar «un balón de oxígeno» al Reino Unido, en un momento en que la situación de España era «muy positiva» debido al Brexit.
Así lo aseguró la vicesecretaria de Política Social del PP, Cuca Gamarra, que exigió al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que «repruebe» este encuentro entre González Laya y Picardo.
Además, la popular censuró que con este encuentro el Gobierno «rompe con la posición que han mantenido todos los gobiernos españoles en relación a Gibraltar».
En la misma línea se mostró el portavoz adjunto de Ciudadanos, Edmundo Bal, quien consideró «obvio» que la titular de explicaciones sobre el porqué de su reunión y sobre los temas que trataron.
Vox, por su parte, afirmó que este encuentro supone «una ruptura sin precedentes de la posición española con respecto de la soberanía del Peñón», denunció Alberto Asarta. Y Agustín Rosety puntualizó que «300 años de Historia le han debido de parecer poco a una adanista que rompe una posición mantenida por todos los gobiernos».
Alegato socialista
Mientras, la defensa del Gobierno es que Laya y Picardo no debatieron sobre la soberanía del Peñón y que la postura de España no ha cambiado.
Fuentes del Ministerio explicaron que el encuentro tuvo lugar para analizar la aplicación de los memorándums firmados con el Reino Unido para regular su salida de la UE y sus efectos en la región.
Por su parte, el ministro de Transportes, José Luis Ábalos, lamentó que en España haya una oposición «que hace de la anécdota un gran escándalo y elude los temas centrales del país».