Parece que la epidemia de gripe ha llegado este año a Valladolid más tade que la temporada pasada.

Bueno, en realidad lo que sucedió el año pasado y el anterior es que llegó antes de lo que es habitual. El pico epidémico de gripe suele llegar en la primera o segunda semana de febrero y luego tarda en bajar el doble de lo que tarda en subir. Desde que se supera el nivel de alerta hasta que remite suelen pasar entre diez y doce semanas. La del año  pasado, además de empezar antes, fue extraordinariamente larga. De cualquier modo, la gripe es muy imprevisible.

¿Qué tipo de virus es el que está circulando este año?

Tanto en España como en el resto de Europa se está produciendo una circulación mixta de dos virus de tipo A, uno del subtipo H3 y otro del subtipo H1. El primero hace que se produzcan más casos de gripe entre la gente mayor y el segundo, entre los niños.

¿Cómo está siendo de eficaz la vacuna de este año?

Es muy pronto para saberlo. Lo malo de la vacuna de la gripe es que se hace anticipando lo que va a pasar. Ahora mismo, o dentro de un mes, se establecerán las previsiones para el año que viene en base a la información que envían los laboratorios a la Organización Mundial de la Salud sobre las cepas existentes. Pero desde ahora al año que viene las cosas pueden cambiar ligeramente. Yo creo que la eficacia de este año contra el H1 va a ser más que aceptable, de entre el 60 y el 70 por ciento. Probablemente esto no sea así con el H3 porque ya tenemos conocimiento de que hay algunas variantes que no se corresponden a la cepa incluida en la vacuna. Si al final de la epidemia el H3 tiene mucho protagonismo, puede que la vacuna funcione un poco peor. También hay que tener en cuenta que llevamos dos o tres semanas de epidemia y todavía no sabemos si va a haber gripe B. De momento en Europa hay muy poco, menos del tres por ciento.

¿Un 60 o 70 por ciento de efectividad se puede considerar un nivel aceptable?

El otro día un usuario de Twitter me decía que nos estaban obligando a ponernos una vacuna ‘mala’. Y no, no es mala. En medicina tenemos muchos fármacos con una efectividad de entre el diez y el quince por ciento. La quimioterapia no cura todos los tumores, pero, ¿qué hacemos? ¿No se la damos al enfermo por eso? En medicina estamos acostumbrados a luchar por todas las posibilidades que tenga una persona, aunque sean pequeñas.

Independientemente de la eficacia de la vacuna, la asignatura pendiente sigue siendo que la gente, especialmente la población de riesgo, se la ponga. Según el Sistema de Vigilancia de la Gripe en España, casi la mitad de los mayores de 64 años no se vacuna.

Efectivamente, y son las personas que más fallecen en las epidemias de gripe. También tenemos que conseguir que suba ese porcentaje en embarazadas. Este año la mejor noticia es que entre los facultativos el porcentaje de vacunados llega al 40 por ciento. ¡Ojo! Entre los que tenemos que indicar la vacuna, un 40 por ciento. Y eso es una buena noticia porque antes era menos. Es importante transmitir que quedan por delante más de un mes de circulación intensa del virus, y que la gente todavía se puede vacunar. A la gente se le pone cara de estupor cuando alguien muere por una gripe, pero desgraciadamente todos los años hay personas que mueren por este motivo.