Salvaguarda laboral y empresarial, prioridades para Amigo

SPC
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La consejera de Empleo e Industria estima que los jóvenes son "de los más damnificados" pero están "preparados" para liderar procesos como el de la digitalización en la Comunidad

Salvaguarda laboral y empresarial, prioridades para Amigo

La consejera de Empleo e Industria, Ana Carlota Amigo, apuntó a la salvaguarda de los puestos de trabajo y del tejido empresarial como los dos ejes principales que articulan las medidas de la Junta para el próximo año con el fin de hacer frente a una situación “muy grave” como consecuencia de los efectos de la pandemia por el COVID-19 que además cuenta con unas previsiones “demoledoras” para el próximo año por diferentes organismos. De esta manera, Amigo apuntó a los trabajadores, los autónomos y las empresas como los principales beneficiarios de estos ejes que se articularán en 13 objetivos. 

Así lo declaró en declaraciones recogidas por Ical durante su comparecencia en las Cortes para dar a conocer las líneas básicas del presupuesto de la Consejería de Empleo e Industria que tiene que hacer frente al “peor de los escenarios posibles” de los que se vaticinaban en el mes de septiembre, después de que las restricciones para superar la pandemia hayan producido “una parálisis económica” que “amenaza” las rentas de los trabajadores y la supervivencia del tejido productivo. 

A juicio de Amigo, estamos frente a “la peor crisis económica que ha sufrido Europa desde el final de la Segunda Guerra Mundial” y, por ello, consideró que “solo entre todos “ se podrán afrontar “los nuevos retos y grandes cambios” previstos en la estructura económica y productiva de la Comunidad. 

Para la salvaguarda del trabajo en la Comunidad, los objetivos pasan por el fomento del empleo, orientando las políticas activas de empleo hacia este objetivo; el empleo juvenil, con el compromiso de incrementar las ayudas a los jóvenes para la empleabilidad; el autoempleo, con el fomento de su implementación transversal como forma eficaz para la inserción en el mercado laboral; la puesta en valor del teletrabajo; el apoyo a los autónomos mediante la promoción de proyectos que les faciliten su adaptación a las demandas del mercado en materia digital; el apoyo a las personas con discapacidad y aquellas en situación o riesgo de exclusión social; y la formación para el empleo, que incluye como novedad un programa de formación para la adquisición y mejora de competencias profesionales relacionadas con los cambios tecnológicos y la transformación digital de la economía para trabajadores ocupados. 

A la hora de proteger el tejido empresarial, los objetivos de la Consejería de Empleo e Industria pasan por la apuesta por la ciberseguridad; la inversión en digitalización industrial ya que es “casi una obligación” para que las industrias puedan competir en un mundo globalizado; la recuperación del sector comercial con la elaboración de la nueva Estrategia de modernización, innovación y digitalización del comercio de la Comunidad; apoyo al sector de la moda o la artesanía no alimentaria; o la intermediación laboral. 

De esta forma, los trabajadores (tanto empleados como desempleados), los autónomos y la empresa son los grandes destinatarios de los objetivos de la Consejería de Empleo e Industria. Para ello, según avanzó la consejera, se habilitarán ayudas para complementar las rentas de los trabajadores más afectados; se invertirá en formación en las nuevas habilidades que, fruto de la pandemia “han pasado a ser un futuro más o menos lejano a un presente inmediato” y en incentivos a la contratación de personas con discapacidad y la consolidación del trabajo autónomo. En total, la Junta destinará a ayudas a los trabajadores 221 millones de euros de los que 102 millones estarán destinados directamente a formación 

Dado que se prevé que la crisis económica impactará “con mayor fuerza” en los mayores de 55 años, la Junta contempla una línea de ayudas para este colectivo con dos programas y un montante total de dos millones: ayudas de pago único para compensar a los trabajadores de la disminución del importe de la indemnización reconocida a favor de aquellos, a causa de los referidos despidos o extinciones de contratos , y ayudas destinadas a trabajadores mayores de 55 años con extinción de su contrato de trabajo que provengan de una empresa en crisis.

En beneficio de las personas con discapacidad, se destinarán 23,5 millones a la integración laboral de personas con discapacidad, tanto en centros especiales de empleo como empresas ordinarias, lo que permitirá hacer frente a los costes salariales de sus trabajadores. Con estas ayudas se continuará apoyando a más de 6.600 trabajadores de los centros especiales de Empleo que prestarán servicio en los 323 centros.

Formación

En materia de formación, como novedad en el presupuesto, se recoge una línea de ayudas públicas destinada a trabajadores ocupados para facilitar que los trabajadores se adapten a la “creciente” digitalización de los nuevos procesos de producción para atender las necesidades de los sectores emergentes relacionados con la Industria 4.0. Se estima que con el presupuesto convocado, que asciende a dos millones de euros, se impartirán 250 acciones formativas con más de 3.000 participantes.

Según la consejera, en el momento actual en el que las tasas de paro son “elevadas” y la oferta de mano de obra está “sobredimensionada” tan solo “los mejores, los más preparados y los mejor formados pueden acceder a las mejores oportunidades laborales”, declaró Amigo, quien dijo que ahora están surgiendo “nuevas oportunidades” en nichos de empleo “que ayer no existían” y para lo que la formación tiene que dar “una respuesta adecuada”. 

El Servicio Público de Empleo destinará alrededor de 100 millones de euros para la formación de desempleados y ocupados, es decir, diez millones más que el año pasado, unas cifras “muy importantes” de las que 69,4 millones de euros para trabajadores desempleados; 13,1 millones para ocupados y 17 millones para programas mixtos de formación y empleo. 

Jóvenes

Al entender que los jóvenes son “uno de los colectivos más damnificados” por esta crisis por lo que los menores de 35 años son “prioritarios” en las actuaciones y medidas de la Consejería de Empleo e Industria, y la consejera anunció la aprobación de medidas específicas adicionales para este colectivo con el fin de incentivar alrededor de 3.000 empleos, 10.000 jóvenes participantes en acciones formativas y 75.000 beneficiarios de algún tipo de prestación o servicio. 

Medidas como el programa de prácticas no laborales dirigidas a jóvenes titulados universitarios y de Formación Profesional de la Comunidad, constituye una actuación programada con fondos autónomos que tiene como objetivo subvencionar a las fundaciones de las Universidades Públicas de Castilla y León, los costes derivados del desarrollo de un programa de prácticas no laborales en empresas de la Comunidad, con el objeto de mejorar la cualificación profesional y la empleabilidad de los jóvenes que hayan finalizado sus estudios recientemente. 

Autónomos

En conjunto, las ayudas que se van a destinar a los autónomos asciende a la cantidad de 10,4 millones lo que supondrá el apoyo a más de 2.000 Autónomos de Castilla y León. Como medida novedosa, la consejera aludió a una ayuda para la realización proyectos de teletrabajo e innovadores con el fin de apoyar a aquellos autónomos que trasladen su actividad a Castilla y León poniendo en valor los beneficios de “la gran calidad de vida” que ofrece la Comunidad como “destino ideal” para desarrollar su proyecto laboral y social.

Del mismo modo, el apoyo y fomento por parte de los emprendedores de la realización de proyectos innovadores, y especialmente de base tecnológica, son unos de las principales características de estas dos líneas de ayuda que en el próximo ejercicio buscarán el incremento de este sector tan importante para la creación de empleo.

Empresas

Dentro del Plan de Choque, se han habilitado dos líneas de apoyo dirigidas a subvencionar las cuotas de la Seguridad Social por contingencias comunes de los trabajadores desafectados de un ERTE. La primera de ellas está dirigida al sector hostelero, con un presupuesto de cinco millones para empresas de este sector que no superen los 100 trabajadores. La segunda línea de apoyo está dirigida a otros sectores afectados por la crisis, con un presupuesto de 4,5 millones para empresas que no superen los 100 trabajadores.

En relación al comercio, y con el fin de relanzar su actividad, la Junta hará frente al desarrollo de políticas que, teniendo como objetivo primordial la modernización, innovación y digitalización del comercio, vayan dirigidas a “impulsar, promover y facilitar la competitividad” del sector comercial, recalcó la consejera. 

Industria

En materia industria, la consejera hizo alusión a una ayuda para fomentar la inversión en ciberseguridad industrial, dotada con 500.000 euros y con publicación anticipada de la convocatoria, con un máximo de subvención por proyecto en absoluto de 20.000 ueor, y en porcentaje del 75 por ciento. 

A juicio de la consejera, la Industria 4.0 constituye “una oportunidad clave” para la mejora de la competitividad de la industria de Castilla y León en un mercado cada vez más global. De hecho, otras economías de nuestro entorno ya han iniciado iniciativas para aprovecharla. En esta línea, advirtió de que “si no actuamos con celeridad Castilla y León corre el riesgo de quedar rezagada en esta nueva revolución industrial”, sentenció.