Roberto Carranza afronta desde este domingo su segunda participación en un Dakar. Lo hace con la experiencia del año pasado, en su debut con un gran 19º puesto en la categoría Side by side, y con las mismas ganas o más de aquella primera aventura.
Repite categoría aunque cambia de coche, al participar con un Extreme GPR20 que, eso sí, ha sufrido retrasos en su puesta a punto y al que no ha podido realizar los test habituales y ha tenido casi que ‘rematar’ estos días ya en las dunas de ArabiaSaudita.
Aun así, sus sensaciones son positivas: «Estoy con muchas ganas, contento, fuerte y entrenados física y psicológicamente».
La cita, que estrena país y recorrido en Arabia, arranca de madrugada. A las siete de la mañana de este domingo y promete espectáculo con 12 jornadas larguísimas entre dunas y desiertos. «¿Seguridad? No va a haber problemas. No ha habido una inscripción de tanto nivel. Los árabes van a tirar la casa por la ventana, que sea un Dakar espectacular y una ventana al mundo, como lo será la Supercopa de fútbol», asegura el vallisoletano.
Con el dorsal 430 y el madrileño Juan Carlos Fernández de copiloto, Carranza se desplazó el martes al país arábico para probar sobre el terreno su vehículo: «Está recién parido, por eso no hemos podido hacer los test. Aunque es buen coche, potente, estable y ágil. En esta carrera lo más importante va a ser la fiabilidad». Su coche es cerrado, tipo pick up y apenas pesa 900 kilogramos.
«Nuestro objetivo antes del proyecto era intentar mejorar el puesto del año pasado, pero el nivel ha subido. Lo primero, cualquier piloto, lo único que quiere es terminar. Y después ver donde estamos. Si el coche va bien arriesgaremos y si no, buscar solo acabar», reconoce.
Carranza volverá a ser el único vallisoletano en el Dakar, algo de lo que se enorgullece: «Estamos en el mejor momento de pilotaje de nuestro vida. Necesitamos ahora que los esponsor nos vayan echando un cable».
Primera etapa
La primera etapa comenzará para los SxS -la categoría del Promyges Rally Team- a las 08:49 hora española. Constará de una primera toma de contacto de 319 kilómetros cronometrados y un enlace de 433 kilómetros. Allí se enfrentarán con un condensado conjunto de elementos que van a caracterizar esta edición, como son pista rápida, recorrido sinuoso, dunas y terreno pedregoso.
El nuevo destino contempla 12 etapas, más de 5.000 kilómetros contra el reloj y unos 7.500 de recorrido, con la arena como protagonista en el 75 por ciento de los casos, aunque también habrá una gran variedad de terrenos. Gracias a las dimensiones y a las características del territorio saudí, el Dakar recupera en su naturaleza extrema en el ámbito de la resistencia, destacando cinco especiales de más de 450 kilómetros.