Una encuesta de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) realizada en noviembre del año pasado, sobre una muestra ponderada de 1.023 ciudadanos de toda España, revelaba que el servicio donde se percibe un mayor riesgo de contagio por coronavirus es el transporte público, al menos para un 67 por ciento de los encuestados.

"El caso es que, cuando se cumple un año del inicio de las medidas de control y prevención del contagio del coronavirus en el transporte público en Valladolid, OCU sigue echando en falta ciertas medidas correctoras. En concreto, en lo que se refiere a Auvasa (Autobuses Urbanos de Valladolid), el control de aforo se realiza a ojo por el propio conductor, lo que no evita las aglomeraciones en las horas de mayor afluencia y por lo tanto impide conservar una distancia mínima de seguridad dentro del autobús. Además, no existen dispensadores de gel hidroalcohólico", explican a través de un comunicado remitido a Europa Press.

En definitiva, la organización considera que es vital reforzar aún más las medidas de prevención del contagio en el transporte público. "Todos los medios deberían disponer de dispensadores de gel hidroalcohólico en las puertas de acceso y salida del vehículo, rellenados al final de cada parada, al tiempo que debería seguir aumentándose la frecuencia de paso en horas punta. Esta última medida es probablemente la más importante de todas y una asignatura pendiente en la mayor parte de los municipios", concluye.