El sector de la Cultura es uno de los más damnificados por la crisis sanitaria y económica de la covid-19. La suspensión de conciertos, actuaciones, ferias y festivales ha limitado la actividad cultural, pero no ha impedido que los creadores sigan trabajando en nuevos proyectos.
Los meses de confinamiento han servido para que un grupo de artistas noveles de Valladolid retomaran o gestaran proyectos que ahora ven la luz. Entre los más prolíficos están los narradores, con varias propuestas de novela negra ambientada en Valladolid, pero también libros didácticos para explicar a los más pequeños la pandemia, que incluyen una apuesta por el cómic. Y sin olvidar la literatura reivindicatvia, como la novela de Jesús Barrio, que reflexiona sobre el cambio social en las tres últimas décadas y reivindica el activismo LGTB+.
| Iria Serrano Medina Escritora «He intentado reflejar la primera sensación que tuve al llegar a Valladolid» |  |
| La creatividad llamó a la puerta de Iria Serrano durante el confinamiento. Esta ingeniera industrial, de 25 años, decidió retomar durante el encierro un proyecto de novela que había comenzado en 2016. «No me senté a planificar. Y el resultado es un poco lo que la novela ha querido contar», explica. Y el resultado es Quince días de agosto, una trama basada en el asesinato a tiros de una familia en su casa de Las Viudas y cómo Estrella, una policía novata recién llegada a la ciudad, debe enfrentarse a múltiples obstáculos para resolver el caso e integrarse en la ciudad. Serrano reconoce que no tenía muchas expectativas cuando envió el manuscrito a la editorial, pero la respuesta fue rápida y su primer libro verá la luz en días. Una historia que se desarrolla en Valladolid, la ciudad donde vive actualmente, porque asegura que tenía ganas de hacer su propio homenaje «a esos otros lugares, más pequeños y cercanos y, en muchas ocasiones, bastante más olvidados». En la novela apunta que ha intentado reflejar lo más fielmente posible cómo es esta ciudad. «De hecho está ambientada en verano, que fue la época en que llegué. He intentado reflejar ese Valladolid asfixiante, que me hizo pensar: qué calor hace aquí». Pero también laten de fondo temas como la importancia de los orígenes, la inseguridad, la dualidad entre cumplir con las expectativas impuestas y los deseos… |
| Dulzaro Músico y compositor Una propuesta musical con raíces castellanas para deconstruir a Lorca |  |
| Dulzaro es un proyecto musical muy personal donde se juega con el misterio. El artista que se esconde bajo este nombre abandera una nueva propuesta musical que busca deconstruir y descontextualizar la poesía de Lorca. «Quiero generar misterio, que la gente busque quién está detrás de esta propuesta», explica el músico y compositor vallisoletano. Y con estas premisas lleva meses preparando el que será su primer disco, del que ya ha publicado dos singles: Córdoba y La Tarara. El proyecto sale de una propuesta becada por la SGAE, donde el músico utiliza las raíces de su tierra castellana. «Busco revivirlas y exponerlas para que la gente más joven no las pierda», detalla. Y desde ese respeto, ha decidido utilizar los poemas de Lorca, por el que asegura que siente pasión, para generar un nuevo paisaje sonoro, con una base de sonidos experimentales, tanto del trap como de la electrónica, pero también utilizando instrumentos propios de Castilla y León. Este músico acumula distintas experiencias musicales en grupos de rock y pop, pero ha decidido dar un giro a su carrera. Ahora sus referentes son artistas como Rodrigo Cuevas y El Niño de Elche, pero también folcloristas como Joaquín Díaz y Vanesa Muela, con los que le gustaría colaborar. De momento, sigue encerrado en su habitación, grabando y preparando temas. «Todo el proyecto ha nacido en mi habitación. Yo toco todos los instrumentos (piano, guitarra,...) e incluyo muchos sonidos naturales», detalla. Y está deseando poder presentarlo en directo. «Lo encaro como una obra de teatro, que intenta no dejar a nadie indiferente. Todo es muy de raíz y muy emotivo», confiesa. |
La pandemia también ha fomentado la creatividad musical. Y empiezan a ver la luz composiciones y grabaciones realizadas en los meses de encierro. En esta línea está el trabajo de Dulzaro, que propone un nuevo paisaje sonoro, con una base de sonidos experimentales, tanto del trap como de la electrónica, pero también utilizando instrumentos propios de Castilla y León. Otro músico, Nacho Prada, también se lanza ahora a la aventura en solitario con su proyecto más personal, el que lleva su propio nombre, cuya carta oficial de presentación es el EP ‘Reflejos, hoy’, que acaba de ver la luz.
solidaridad. Otras propuestas artísticas surgen de la solidaridad. El grupo Naïa presenta estos días su single Luna LLena, que surge de las colaboraciones en unos talleres musicales con la Fundación Intras (entidad sin ánimo de lucro que acompaña a personas con problemas de salud mental en la recuperación de sus proyectos de vida. El single se acompaña de un vídeo animado a partir de las letras y dibujos de sus participantes.
Savia nueva para el resurgir de la actividad cultural vallisoletana.