El Universidad de Valladolid no tuvo opciones esta semana ante un Extremadura Arroyo que es líder, y no por casualidad. Las locales, apoyadas por un público entregado, vencieron por 25-15, 25-15 y 25-12 en un duelo que tuvo poca historia.

El de Cáceres es un equipo hecho para ascender. Apoyado en la brasileña Inmaculada Lavado y con una plantilla experimentada y de mucha calidad, su objetivo está claro. Por su parte, el UVa buscaba, consciente de la dificultad del encuentro, prolongar la buena racha de resultados que vive, tras haber conseguido la anterior jornada su primera victoria. Las universitarias no lograron los puntos, pero sí adquirieron un aprendizaje que toca llevar a la práctica frente a equipos de su nivel.

Desde el principio las locales asumieron el mando. Las vallisoletanas compitieron con garra, pero la ventaja de Extremadura aumentaba con naturalidad en el primer set. Los ajustados 6-5 y 9-7 dieron paso a un 21-11 que sentenció la manga.

Similar guión tuvo el segundo. Incuso las UValquirias se pusieron por delante al inicio, con un resultado de 2-3, y mantuvieron el pulso hasta mitad de set. Allí Extremadura se desmarcó en el marcador sin opción a la reacción.

Las locales, sabedoras de su buen nivel, salieron a sentenciar el partido por la vía rápida en el tercero, y prácticamente desde el principio obtuvieron una renta cómoda.

La Universidad de Valladolid ocupa el penúltimo puesto de la Superliga 2 Femenina de voleibol, tras la victoria esta jornada de Sestao, rival directo por evitar el descenso. Precisamente este es el contrincante el próximo encuentro, el sábado 1 de diciembre a las 18:30 horas en Fuente la Mora, un duelo vital para ambos equipos.