La Junta de Castilla y León ha vuelto a ordenar el confinamiento de los municipios de Íscar y Pedrajas de San Esteban ante el elevado número de contagios de la covid-19, que indican que existe transmisión comunitaria entre la población, según fuentes del Ejecutivo consultadas por Ical.

La decisión se ha adoptado para contener el aumento de la epidemia en estas zonas de la provincia de Valladolid, donde la capital se encuentra en su tercera semana bajo medidas restrictivas. 

El 2 de agosto la Junta ya decidió confinar estas dos poblaciones, las primeras de Castilla y León que en la nueva normalidad se vieron afectadas por estas medidas ante el número de positivos de coronavirus. La cuarentena generalizada finalizó pasados 14 días al mejorar la situación epidemiológica que ahora ha vuelto a complicarse. 

La zona básica de salud de Íscar, que incluye el municipio de Pedrajas de San Esteban, suma 88 casos de coronavirus en los últimos siete días y 119 en los últimos 14 días, con unas tasas por cada 10.000 tarjetas sanitarias del 77 y del 104. 

Este nuevo confinamiento supondrá un «fuerte golpe» para la economía de ambos municipios. El alcalde de Íscar, Luis María Martín, destaca que muchos sectores  están todavía recuperándose del anterior confinamiento y que ahora verán nuevamente perjudicados sus negocios. El regidor explicó que no se entendería que se limite el movimiento en ambos municipios, cuando tanto en Valladolid como en Salamanca se han tomado medidas restrictivas pero sin restringir el movimiento. 

Además, indicó que existe «mucho temor y preocupación» entre los vecinos debido a la situación y por eso espera que las medidas de restricción no sean las mismas, sino que sean un poco más permisivas para que los negocios y empresas de la localidad puedan continuar su recuperación. «Ahora que parecía que nos comenzábamos a recuperar nos llega esto». 

Ambos municipios fueron confinados el pasado 1 de agosto, cuando la Junta decidió restringir el movimiento de personas para acabar con la transmisión comunitaria. No se podía entrar o salir de los municipios, salvo aquellos desplazamientos que se produjeran por motivos justificados. 

Se permitió la circulación de personas residentes dentro de los municipios, si bien se desaconsejaban los desplazamientos y realización de actividades no imprescindibles, además se suspendieron las visitas en los centros residenciales de personas mayores y las salidas de los residentes al exterior.

Los vecinos de ambos municipios no pudieron mantener reuniones de más de diez personas, tanto en el ámbito público como privado. 

Fueron 14 días de aislamiento que hicieron que los datos de incidencia de la covid-19 mejoraran de forma considerable. La Junta de Castilla y León decidió levantar las restricciones después de que comenzaran su aislamiento con 43 casos positivos y lo dejaran en nueve, lo que dejaba la tasa de incidencia por cada 10.000 tarjetas sanitarias en 8,13.

pesquera. Por otra parte, el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo 2 de Valladolid no ratificó este jueves las medidas sanitarias contenidas para el municipio de Pesquera de Duero. En un auto, el juez señala que «las medidas adoptadas no guardan la más mínima relación, no tienen la más mínima justificación técnica» y añade que «un informe de situación epidemiológica, por muy bueno y completo que sea (y este no lo es), debe sustentar cada una de las decisiones que se toman. Y nada de esto se ha hecho».

Además, el juez señala que «no se comparte, en absoluto, la afirmación de la administración demandada referida la proporcionalidad intrínseca de las medidas que se han adoptado con la finalidad para proteger el derecho a la vida e integridad física».

En el auto, al que ha tenido acceso Europa Press en fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León (TSJCyL), se explica que no resulta viable jurídicamente la ratificación de las medidas adoptadas por la Junta de Castilla y León «al ser notablemente desproporcionadas y estar insuficientemente justificadas».