Sergio González no ha querido revelar este viernes si el domingo jugará Roberto, ya recuperado de la covid, o Masip en portería; o si volverá a su clásico 1-4-4-2 o mantendrá el sistema de juego por el que apostó en Barcelona. El entrenador del Real Valladolid, que ha asegurado que su equipo se rebela ante todas las circunstancias adversas, ha dejado claro que no deben pensar en que el Granada jugó ayer y que espera un rival duro y complicado.

"Decidido lo tenemos, pero no lo voy a decir. Lo hemos dicho desde el principio, tenemos dos grandes porteros, con unas cualidades grandísimas", ha respondido sobre qué portero será el elegido el domingo. "No estamos encorsetados en un sistema. El otro día salió bien, pero es verdad que en la segunda parte, con su cambio nosotros también cambiamos al 4-4-2", ha recordado sobre el dibujo sobre el campo.

El resto de la rueda de prensa, además del habitual ya parte médico, ha versado sobre las sensaciones tras el partido ante el Barcelona y el análisis del rival. "Tenemos una mezcla de todo. Pero esto es fútbol y deporte, hay que levantarse. Estamos en eso. El equipo tiene alma, fuerza, amor propio… y aunque la sensación es que siempre nos pasa, son cosas del fútbol. El equipo es superviviente y se rebela", ha dejado claro sobre lo ocurrido tras la derrota en el Cam Nou, añadiendo que "ojalá sea un antes y un después para la energía del exterior. Para que la gente crea que somos un equipo que se va a salvar. A nosotros para reafirmar. Nos faltó llevarnos algún botín, que es lo que necesitamos".

"Esperamos un Granada muy competitivo. Ayer se midieron al Manchester y eso lo dice todo. Trabaja bien, con dos bandas muy peligrosas, arriba Jorge Molina te da un plus de referencia, los tres interiores son de recorrido y calidad. El míster ha encontrado una hoja muy bien diseñada y es un equipo difícil de batir. No hay que pensar que jugaron ayer. Vamos a encontrarnos con un Granada con un once inicial que jugará muy a su estilo", ha hablado de los andaluces. Sobre el momento de la temporada, "cada partido ya es una final, con la importancia como tal. Entendemos que estamos en un buen momento. Sí tenemos la responsabilidad de mostrar ese nivel tan alto que tres fallos nos han penalizado".