«En ningún caso se autorizará la instalación de salones a menor distancia de 100 metros de los accesos normales de entrada o salida a centros de educación preescolar, centros que impartan enseñanzas escolares y centros de enseñanza universitaria». El Reglamento regulador de las máquinas de juego y de los salones recreativos y de juego de la Comunidad de Castilla y León que, por supuesto afecta a Valladolid, es claro desde hace varios años. Pero eso no impide que en la capital haya muchos locales que rocen la ilegalidad y que incluso incumplan una ley que las asociaciones de jugadores rehabilitados piden a gritos que se modifique, con un punto igual de claro, el de ampliar la distancia entre estos locales y un centro educativo a 500 metros «lineales». Espacio que el Ayuntamiento ya situará en 200 metros en el nuevo PGOU.
Actualmente, de los cuarenta locales de juego existentes en la capital vallisoletana, doce están a menos de 200 metros y solo dos se encuentran a más distancia de esos 500 metros que se piden en una futura reforma de la ley; mientras que otros dos se encuentran a menos de los cien metros que marca actualmente la regulación, es decir hoy no podrían abrir. Uno de estos últimos está en pleno centro de la capital, en la calle San Blas; y el otro, en la céntrica plaza España. En el primero de los casos, apenas un paso de peatones separa el local de la entrada al colegio Santa Teresa de Jesús (exactamente 16 metros). En el segundo, poco más (75) lo hace del colegio Antonio García Quintana. «Sabemos que alguno más lo incumple, como el de calle Embajadores, que está a apenas cien metros del colegio El Carmen, pero se amparan en eso de que la distancia debe ser por los pasos habituales de los peatones», apunta Ángel Aranzana, presidente de Ajupareva, la Asociación que en 2018 realizó un mapa interactivo de los locales de juego existentes en Valladolid y los centros escolares, cogiendo también como referencia bibliotecas o centros de estudio: «Luego está el tema de los parques, que algunos locales están en mitad de uno...». En dicho mapa se puede comprobar que solamente dos salones de juego cumplirían con esa distancia de los 500 metros. Uno de ellos, el Casino Roxy y el otro el Bingo de la calle Mantilla. El resto, los otros 38 están por debajo de ese medio kilómetro.
Aun es más, con el nuevo PGOU, que apunta que «el uso básico ‘salas de apuestas’ no podrá situarse a menos de doscientos (200) metros del uso colectivo docente», doce se quedarían al margen de este artículo que se prepara desde Urbanismo, que pueden ser más, ya que se añadirá que tampoco pueden colocarse «a menos de cien (100) metros del resto de usos ‘colectivos’ con actividades destinadas a personas menores de 18 años». 
«Nuestra mayor preocupación ahora mismo es la distancia entre un local de juego y un centro educativo». Por eso, la petición de Ajupareva, que en los últimos tres años ha visto cómo han crecido los números de sus pacientes (ellos usan la palabra socios) -«en octubre ya habíamos llegado a las 112 acogidas de todo 2018»-, va más allá y ya está en la Mesa de las Cortes. 
Valladolid contaba a finales de 2018 con 25 salones de juego, 7 casas de juego, 5 bingos y 1 casino, contabilizando 38 locales. «Para 2019 había tres licencias más, con lo que ya pasan de 40 los locales», apuntan desde Ajupareva. 
‘El Día de Valladolid’ ha confirmado los datos del mapa interactivo realizado desde esa Asociación, con sus distancias, añadiendo las opciones para el juego que se han abierto este mismo año -incluso ya hay alguna anunciada en una de las webs de los operadores con licencia en la Comunidad, como un posible nuevo local en calle dos de Mayo, 12, justo enfrente del Colegio Público Cardenal Mendoza-.
Dos esos cuarenta locales de juego se encuentran actualmente a menos de 100 metros de la entrada a un centro escolar y con la actual ley no podrían haber abierto sus puertas. Otros diez se encuentran en un margen cercano a la ilegalidad, entre los 100 y los 200 metros desde su puerta a la de un centro educativo, tal y como dice la ley de preescolar y hasta universitario. El grueso principal estaría en la franja entre 200 y 300 metros; y entre 300 y 400. Mientras que uno se sitúa a menos de 500 metros y solo dos por encima de esa distancia. Esos dos serían los únicos que podrían abrir en un futuro si se lleva a efecto el cambio en una Ley que data del 24 de junio de 1998 y que en febrero 2005 recogió en un Decreto esa distancia de los cien metros.
«El problema radica en que al hablar de esa distancia se dice que es por el paso habitual de un peatón, es decir pasos de cebra, aceras... y, en algunos casos, es mucho mayor que si se marca de forma lineal», añaden desde Ajupareva sobre la ‘trampa’ del espacio entre locales y centros educativos. Por eso, la petición de la asociación es que se amplíe esa distancia por cinco y se pase a hablar de distancia lineal. Además se solicitará que no solo se tengan en cuenta los centros educativos y se amplíe a bibliotecas, residencias de estudiantes o centros cívicos.

Dos incumplen la distancia. De los cuarenta locales de juego que hay en Valladolid, dos incumplen la distancia de los 100 metros respecto a un centro educativo; y doce lo harán con el nuevo PGOU (y la ampliación a los 200).

Doce locales de juego están a menos de 200 metros de un cole

Centro y delicias, los más poblados. La zona centro (incluida la Circular), con catorce locales; y Las Delicias, con siete, son las dos zonas con más opciones para el juego presencial en la capital castellana

El camino de la esperanza. Es la calle que más salones de juego presenta, con tres en un radio de unos 200 metros, dos en la misma arteria y uno más en una de las que corta. Están muy cercanos a un instituto 

Covaresa y Girón, sin opciones. Hay algunos barrios, como Covaresa, Parque Alameda, Barrio España o Girón, en los que no hay abierto ningún local de juego. Huerta del Rey tiene uno cerca pero no está en su barrio

Quince locales nuevos en 2 años. Los cuatro operadores autorizados en la Comunidad empezaron a abrir locales en 2015. Dos años después ya tenían 25 y este 2019 cerrarán con más de cuarenta establecimientos