No era la primera vez que le sucedía en este arranque liguero: al VRAC le costaba mucho entrar en el partido y comenzaba perdiendo tras el golpe de castigo pasado por Tomas Hanham.

Hasta quince minutos tardaban los azulones en estrenarse y lo hacían con un puntapié de castigo de Kemu Valetini que igualaba el marcador. Pero, al contrario de lo que podía pensarse, los andaluces no se achantaban y seguían dominando. Fruto de ello y de los errores de concentración locales, volvían a adelantarse con una nueva patada. Curiosamente, era el principio del fin para el Ciencias, puesto que ya no anotaría más, pasándose del 3-6 del minuto 23 al 41-6 a la conclusión.

Poco a poco, el Entrepinares engrasaba la maquinaria y una recuperación de Valetini tras saque rival desde línea de veintidós originaba la conexión argentina entre Guido Albertario y Tani Bay. El segundo recibía el oval del primero y, tras dos fantásticos quiebros, conseguía la primera marca. Cristian Bartoloni hacía poco después la segunda, aunque de nuevo, Valetini no lograba pasarla. La exclusión de Sione Fifita tras ver la cartulina amarilla en los últimos minutos de la primera parte facilitaba la labor para el VRAC, cuyo empuje originaba un ensayo de castigo que ponía el 20-6 en el tiempo de descanso.

El VRAC se crece y estrena liderato - Foto: JCR

Con la inercia positiva del final del primer acto, el equipo azulón regresaba al césped de Pepe Rojo con mucho más ritmo y concentración. Los sevillanos volvían a cometer un fallo al marrar un golpe de castigo y los locales lo aprovechaban a la perfección poco después. Una nueva jugada vertiginosa de Bay servía en bandeja la marca a Pedro de la Lastra, primera de las dos que conseguiría en el encuentro.

Un robo y posterior carrera de Axel Papa prácticamente ponía la sentencia quesera con muchos minutos aún por disputarse. Los hispalenses trataban de levantarse y volvían a tomar el mando en busca de acortar diferencias, pero cometían un avant en el último instante, cuando tenían el ensayo cerca. Un quiero y no puedo.

Lo que llegaba, sin embargo, era la última marca vallisoletana, con el marbellí De la Lastra de nuevo como protagonista. Desde entonces, el ritmo por parte de ambos conjuntos decaía bastante. Con todo controlado, Diego Merino movía el banquillo y el tramo final no presentaba mayor noticia que la lesión de Álvaro Pírez, que tenía que ser ayudado en su retirada del terreno de juego con un esguince en su tobillo.

La clasificación deja al VRAC en lo más alto, en solitario, por primera vez en lo que va de temporada, pero también un grupo de cabeza con seis equipos en sólo cuatro puntos. La próxima jornada toca un duro partido para el Quesos, que visitará al Lexus Alcobendas en Las Terrazas.